Un total de 5′691,473 afiliados a las administradoras privadas de fondos de pensiones (AFP) retiraron S/ 65,923 millones de sus ahorros previsionales por pandemia a octubre del 2021.
Como se recuerda entre el 2020 y 2021, el Poder Ejecutivo y el Congreso autorizaron cinco programas de retiros extraordinarios del ahorro jubilatorio para los afiliados al Sistema Privado de Pensiones a fin de mitigar la reducción o falta de ingresos y la situación de desempleo generados por el estado de emergencia nacional, debido a la pandemia.
Las normas emitidas fueron:
- Los decretos de urgencia (DU) 34-2020 y 38-2020, que autorizaron el retiro de hasta S/ 2,000 de la cuenta individual de capitalización (CIC)
- La Ley 31017, que autorizó el retiro de hasta 25% de la CIC con un retiro mínimo de una unidad impositiva tributaria (UIT) y máximo de tres UIT
- La Ley 31068, que estableció el acceso de hasta 4 UIT de la CIC, bajo criterio de desempleo.
- La Ley 31192 que permitió retirar hasta 4 UIT de la CIC.
“Este monto retirado representa el 8.1% del Producto Bruto Interno (PBI)”, destacó la SBS en su último informe semanal.
En ese contexto, se registró la salida de un total de S/ 32,200 millones (49% del total) bajo los alcances de la Ley 31192; S/ 19,647 millones (30% del total) bajo la Ley 31017; S/ 9,016 millones (14% del total) bajo la Ley 31068; S/ 2,966 millones (4% del total) por el DU 34-2020; y S/ 2,094 millones (3% del total) por el DU 38-2020, precisó la SBS.
Además, el 67% de los afiliados que retiraron (sus ahorros jubilatorios por pandemia) fueron hombres y el restante 33% mujeres.
El último programa (Ley 31192) fue el ocasionó el mayor retiro de los fondos de todos los aprobados durante el estado de emergencia nacional porque no se focalizó en alguna situación crítica, sino que estuvo dirigido a todos los afiliados del sistema privado.
-Edades-
El 70% de los afiliados activos retiraron (total o parcialmente) sus fondos de pensiones (a octubre del 2021).
En este aspecto, el mayor porcentaje de afiliados con retiros de su CIC se observó en el rango de 31 a 40 años (80% de este grupo retiró), es decir, se trata de una población joven que -al retirar o agotar su fondo- acorta el ciclo laboral de ahorro jubilatorio, sostuvo.
Así en lugar de 40 años de horizonte de ahorro, este se redujo a la mitad, considerando además, el tránsito de trabajador dependiente a independiente, añadió.
Los afiliados retiraron en promedio el 82.1% del ahorro jubilatorio, siendo la mediana de los retiros como porcentaje de la CIC de 96.3%.
Estos resultados se explicaron porque los jóvenes afiliados entre 21-30 años (que representan el 25.3% del total) retiraron en promedio alrededor del 90% de su CIC; mientras quienes tienen entre 31 y 40 años (31.7% del total) retiraron, en promedio, el 86% de su CIC.
Asimismo, también contribuyó a registrar un alto porcentaje retirado de la CIC el hecho de que 27.8% de quienes retiraron accedieron a todo su fondo de pensiones.
Para este grupo, el panorama previsional resulta preocupante -alerta la SBS- porque ya no cuentan con un ahorro jubilatorio, generando una potencial situación de vulnerabilidad económica en su vejez.
“Estos afiliados podrían requerir a futuro la ayuda del Estado y/o de sus familias; en el primer caso quizás mediante pensiones no contributivas, y en el segundo, mediante arreglos intergeneracionales como mecanismos de transferencias familiares”.
En términos agregados, en marzo de 2020, mes anterior al inicio de los retiros, el número de afiliados sin ahorro previsional (CIC igual a cero) fue de 850,000l (11.2% de los afiliados activos); mientras que a octubre 2021, como consecuencia de los retiros durante el estado de emergencia nacional, el número de afiliados sin ahorro previsional se incrementó a 2.33 millones (28.5% del total de afiliados activos), registrando esta variable un crecimiento de 175%, alerta.
Si bien los que menos han retirado han sido aquellos afiliados con edades mayores como los de 65 años (19%), al retirar el fondo no solo reducen inmediatamente el ahorro jubilatorio, sino que aportarán un menor monto para su cobertura de salud, que es algo inherente al beneficio de la jubilación y que lo protege de manera vitalicia en la etapa de la vejez.
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