Ricardo Márquez Flores, presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI), comenta sobre el panorama que enfrenta el sector manufacturero.
En agosto la economía siguió cayendo (-9.3%), pero a una tasa menor que en julio (-11.7%) y mucho menor a la de abril (-40%). ¿Se está recuperando el PBI más rápido de lo esperado como afirma el Gobierno?
Es lógico que desde el punto de vista estadístico la economía se recupere después de haber caído a tasas tan grandes, pero aun no llegamos a niveles pre-pandemia. Además, estamos hablando del sector formal, cuando la mayor parte de la economía es informal. Tenemos que hablar de los temas que preocupan, hay 2.9 millones de jóvenes que hoy no estudian ni trabajan.
Según el MEF el PBI ya está al 98% con la apertura de actividades de la fase 4. ¿Es eso así?¿A qué nivel produce la industria?
Se puede decir eso, pero al final las empresas industriales están produciendo al 60% de su capacidad. Te pongo el caso de la cerveza, que está produciendo a 40% menos de su nivel normal, te lo digo porque hablo directamente con las empresas.
¿Entonces, eso de que ya se está al 98% del PBI es un deseo, una meta?
Debe ser una meta; además, se puede abrir todo lo que se quiera la economía, las actividades, pero no está la demanda y si no hay demanda, no hay reactivación.
¿Se refiere a que no crecen las ventas?
Así es, no hay mayores ventas, primero porque la gente no gasta como antes, porque se está cuidando y deben tener ahorros por si se contagian, y en eso están todos los sectores sociales. Entonces, no hay más gasto, vas a un centro comercial y está prácticamente vacío. Es cierto que se vende, pero en los rubros de comida, medicinas, productos de limpieza. Lo que más se recupera hoy es el sector informal que no necesita protocolos para operar, para producir.
¿Como están las ventas en general en el sector industrial?
Hay tres ramas que no han parado: alimentos, medicinas y limpieza, que son las que han seguido vendiendo, pero el resto de sectores está produciendo al 60%, como dije; sin embargo, hay ramas de la industria cuya producción ha crecido como cemento y, especialmente, la venta de ladrillos, pero eso porque la construcción informal está creciendo de manera importante.
¿Ahora que ya se reiniciaron las actividades incluso parte de la fase 4, qué industrias son las más goleadas?
En la industria hay como 58 mil empresas en confecciones y textiles, otras 15,000 en calzado, luego le siguen en cantidad de empresas y creación de empleo, alimentos y metalmecánica. Los dos primeros han sido tremendamente golpeados, no sólo por la pandemia sino por la sobre importación, en plena pandemia, de estos productos. Entonces, la pregunta es quien es el responsable de que haya habido esta importación cuando todo estaba parado.
¿Cuánto empleo se ha perdido en la industria como un todo?
A setiembre son unos 200 mil aproximadamente (sólo en Lima se perdieron 152 mil entre julio y setiembre de este año).
¿Cuántas empresas industriales se han acogido a la suspensión perfecta de labores?
Las que se han acogido han sido más que nada de la pequeña empresa. Sus pedidos ya han sido prácticamente resueltos por el MTPE, a un poco más de la mitad (de unas 30,000 empresas) aproximadamente las han aprobado y al resto no.
¿Y esas últimas que han hecho, han despedido gente?
Lo único que puedo decir es que no hay empresa pequeña que pueda resistir más de seis meses sin producir ni vender. En muchos de estos casos han arreglado entre dueños y trabajadores. Ahora se han dado cuenta que la suspensión perfecta de labores, que se acompaña con el subsidio al 35% de la planilla de las pequeñas empresas, es una buena medida para mantener puestos y el ministerio de Trabajo está evaluando un segundo subsidio, pero salen analistas ultraliberales que dicen que no se debe hacer eso porque el mercado por sí solo debe crear el empleo.
Y usted no comparte esto último…
Primero, veamos de qué mercado se habla, del 30% formal o del 70% informal. Lo que digo es que para ese 30% puede ser que el mercado solucione el problema del empleo, pero en el segundo caso hay 2 millones de empresas pequeñas inscritas en la Sunat (RUC) que no declara trabajadores en planilla. Entonces, la SNI propone que se le dé el subsidio a la planilla a esas empresas, a cambio de que estas se formalicen.
Pero eso requiere de una ley...
Claro, se tiene que dar una nueva ley laboral para la pequeña empresa. De lo que se trata es de darles incentivos para que se formalicen y a la vez preservar la salud de sus trabajadores, pero por más de seis meses porque si no, esas empresas vuelven a la informalidad. Pero esta ley hay que plantearla a los candidatos a la presidencia porque este gobierno ya está de salida. Hemos hablado con la CGTP y están de acuerdo en que a aquellas pequeñas empresas que formalicen su planilla se les da el subsidio y además crédito.
Cuántas de las empresas industriales han cerrado os están yendo al Indecopi…
En este momento hay empresas, que en su mayoría son pequeñas y tienen problemas por lo que están cerrando, pero arreglan con sus trabajadores directamente. A Indecopi van las medianas y grandes empresas, de esas sólo hay algunas. Lo que si se ven con pena es que muchos gimnasios están cerrando.
¿Cuántos gimnasios hay en el país y cuántos han cerrado?
Hay 3,000 gimnasios que emplean a 40,000 trabajadores y ya han cerrado 600.
¿Han ayudado a las empresas industriales los programas Reactiva Perú y el FAE Mype? ¿Qué ramas se han favorecido más?
Si, Reactiva ha ayudado. El problema con el FAE es que ahí están esos 2 millones de empresas pequeñas que los bancos no los ha aceptado porque no cumplen los requisitos.
No sólo eso, usted dijo que tampoco tienen demanda. Entonces, no pueden asegurar por lo menos un flujo de ingresos…
Claro, el banco tiene que cuidar el dinero de los ahorristas. El problema es que el mercado se ha achicado, la torta disminuyó y eso es lo que se refleja en que las empresas no tienen capacidad de repago porque no venden suficiente. Y eso crea desempleo.
¿Qué opina del inicio de la fase 4, ha sido tímido?
Lo que pasa es que el gran problema que tenemos es que la política de rastreo de los contagios ha fracasado, hemos participado como SNI, pero nunca pensamos que de 1 millón bajaría a menos de 100 mil los inscritos en el Contac tracing. Tengo que decir, además, que llamado Gobierno digital es un desastre, porque no está funcionando.
¿Qué perspectivas tienen para el sector industrial para este año y para el verano que se acerca?
Igual que todos los peruanos aspiramos a que la pandemia se solucione rápido, pero hacemos propuestas y además en la misma SNI les decimos a los empresarios industriales que hay que seguir invirtiendo porque este es nuestro país, que como gremio vamos a hacer unas propuestas que esperamos que los partidos políticos los acojan. Lo cierto, es que acá falta inversión privada y nosotros decimos que tenemos que ir hacia el desarrollo sectorial.
¿Cómo se puede efectivizar ese objetivo?
Hemos propuesto ciertos mecanismos para que se recuperen las exportaciones y el mercado interno, estamos trabajando con los ministerios. Pero para nosotros la defensa del mercado interno es una prioridad, en el sentido de defenderlo de la competencia desleal, no que se pare la importación. Aquí no ha habido un ministerio de comercio exterior sino uno de exportaciones porque no han atendido el tema de las importaciones.
Nos dice que trabajan con los ministerios, qué han propuesto y cuándo se darían esas medidas.
Por ejemplo, hemos propuesto el factoring, pero lo están demorando, dijeron que lo iban a sacar este 15 de octubre, pero ahora dicen que lo van a sacer en diciembre. No entiendo por qué, si es un mecanismo que va a dinamizar el mercado interno.
¿Qué riesgos pueden truncar la recuperación de la economía?
Uno es la pandemia misma, que se está controlando, pero es prioridad. La mejor manera de reactivar es que los contagios sigan bajando hasta desaparecer. Otro riesgo es el pesimismo, hay una percepción que no se va a mejorar tan rápido, hay que evitar esta percepción porque la economía sí se puede recuperar más rápido, todo depende de la inversión privada, ya que la inversión pública está muy lenta.
¿No ven un riesgo político?
El único riesgo político que vemos es que suba al gobierno un radical, porque incluso los de izquierda que están en el Acuerdo Nacional no se oponen a la inversión.
¿Están afectando a las inversiones privadas las denuncias de corrupción contra el presidente Vizcarra y el nuevo pedido de vacancia?
Nosotros pensamos que el tema del presidente tiene que seguir su curso de investigación. Es más, él a través del primer ministro ha dicho que lo investiguen y se aplique lo que dice la Constitución, Por su parte el Congreso tiene que seguir sus procedimientos y si bien es atípico lo que pasa hoy en el Perú, hay que experimentarlo. Lo que tiene que primar es que debemos mantener la estabilidad porque ya falta poco para las elecciones.
¿Pero, esta situación, está afectando a las decisiones de inversión privada o no?
No mucho, porque se ve que los inversionistas siguen queriendo invertir en proyectos como Tía Maria. Por otro lado, hay problemas en inversiones de hidrocarburos. Hay que poner gente que sepa, cómo es posible que Colombia produzca 600 mil barriles diarios y Perú sólo 30,000.
Desde el punto de vista de la SNI, ¿qué agenda mínima debería y podría ejecutar el gobierno en lo económico de acá al término de su mandato?
Primero tienen que arreglar el tema de Majes Siguas II. La CAF está dispuesta a financiar los US$ 104 millones, a través de Cofide. Segundo, ya que no pueden anunciar Tía Maria, debe anunciar proyectos mineros como San Gabriel (US$ 1,600 millones de inversión); los sulfuros de Yanacocha (US$ 2,100 millones), y Coroccohuayco en Espinar (US$ 590 millones). Para ello tienen que resolver la Consulta previa pendiente que tienen esos proyectos.
¿Y por el lado del mercado interno?
Para la pequeña y mediana empresa, aparte del factoring, deben salir, como ya está ocurriendo, los programas de compras del estado, pero agilizándolos mes a mes. Porque con el programa que tiene de arreglar las carreteras y los ríos (Arranca Perú y Reconstrucción con Cambios) no alcanza, es muy poco.
El gobierno tiene que actuar y enviar a los empresarios el mensaje de que tiene el control. El hecho de que el presidente esté cuestionado, debe hacer que el Gabinete siga trabajando. Porque la percepción ahora es que está parado todo y eso no puede ser.
¿Hay esa percepción de que todo está parado en el gobierno?
Hay esa percepción, no anuncian nada nuevo, eso es una realidad. Tienen que salir a anunciar las cosas que están haciendo.
Se requieren medidas sectoriales para reactivar la economía
Para reactivar la economía la SIN tiene una propuesta que presentará en próximos días para construir una política de desarrollo social y económico, que contempla el impulso de 9 sectores productivos, “porque se tiene que reconocer que las medidas económicas transversales no han funcionado en el Perú”, anuncia Ricardo Márquez, presidente del gremio industrial. Estos sectores son: Pesca para consumo humano directo y acuicultura; textil y confecciones; construcción; turismo y gastronomía; forestal; Alimentos y bebidas; Minería MiPymes y TIC (TIC o tecnologías de la información y la comunicación)
Si funcionó la minería o agroindustria fue porque se les dio algunos incentivos económicos específicos, pero, además, se tiene que planear, diseñar la política de mediano plazo.
Por ejemplo, se hicieron Tinajones, Chavimochic, como infraestructura previa para que luego vengan las siembras y la agroindustria. Ahora necesitamos infraestructura dirigida hacia el desarrollo de nuevos motores para la economía: Puertos en Chimbote en Ilo y en Tacna, es un prerrequisito para impulsar las exportaciones de pesca de consumo humano directo, que da miles de empleos. Lo mismo ocurre con la parte forestal. Se necesitan carreteras para sacar la madera pasa bajar los costos.