Redacción Gestión

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El ministro del Ambiente, , sostuvo que en el ya no existe una "satisfacción garantizada" y el ejemplo más evidente es el caso del proyecto Conga en Cajamarca.

"Lo ambiental hoy en día se mueve en un mundo de tecnología e información que es un muy rápido. Hay ejemplos concretos (como el ) que ayudan a atender que ya no habrá una satisfacción garantizada, porque siempre vamos a tener distintas posiciones, algunas contrapuestas, y sobre ese mundo vamos a tener que seguir operando", explicó.

Por ejemplo, en el caso del se agotó las posibilidades de diálogo y el resultado fueron "negativas rotundas al proyecto y al diálogo, sin fundamentos", sostuvo el ministro Pulgar Vidal.

"Nunca hay una evaluación real de dónde se está cortando el diálogo", advirtió.

Asimismo, el ministro del Ambiente planteó que en este contexto el gran reto de la gestión ambiental es evitar los pasivos ambientales.

"Lo que hoy en día es una actividad bien regulada, un relave bien estabilizado o un tratamiento con una sustancia bien considerada, mañana puede convertirse en un pasivo ambiental, y ese es el reto del derecho ambiental frente a las actividades económicas", indicó.

Advirtió que este asunto podría generar reacciones posteriores. "Cualquier operador podría decir por qué a mí me van a atribuir la responsabilidad si yo ejercí regularmente mi derecho cuando estaba en plena operación", dijo.

Estas declaraciones fueros dadas en la mesa redonda "Retos de la regulación del medio ambiente en el Perú", organizada por la Universidad del Pacífico.