El Perú ha retrocedido en diversos ámbitos de desarrollo económico, social, educativo e institucional, en comparación con su desempeño previo a la pandemia. Cabe indicar que algunos indicadores de desarrollo se han recuperado luego de la pandemia, pero en la mayoría de los casos esto no ha sido suficiente para recuperar los niveles que se tenían previamente, como en el caso de la pobreza, según IPAE Mide
También, se aprecia una evolución negativa de indicadores más cercanos al bienestar de la población en su día a día-indicadores de mercado laboral, seguridad ciudadana, infraestructura educativa-. Esto explica, a su vez, el deterioro de la percepción de progreso del país a niveles históricamente bajos. Cabe resaltar que también se ve evidenciado el avance positivo en algunos indicadores puntuales, como la conexión digital en los hogares y colegios, y la implementación cada vez más generalizada de políticas de equidad de género en las empresas.
IPAE Mide es un sistema de monitoreo de 36 indicadores claves del desarrollo, del país enmarcado en los 4 pilares - Institucionalidad Sólida, Crecimiento Económico Sostenible e Inclusivo, Educación de Calidad e Igualdad de Oportunidades - y los 18 principios IPAE.
El estudio fue realizado por APOYO Consultoría e IPSOS Perú, con el fin de que la ciudadanía se mantenga alerta, conocer, analizar y evaluar la situación del Perú en aspectos clave de su desarrollo, y generar acciones e incidencia oportuna para que el país avance.
El indicador del Pilar Institucionalidad Sólida
Este indicador está compuesto por nueve indicadores: Posición en el ranking de Democracia; Apoyo a la democracia; Percepción de la gestión pública regional; Posición en el ranking de percepción de Corrupción; Indicador integrado de satisfacción de servicios públicos; Resolución de expedientes judiciales; Confianza en el Poder Judicial; Victimización; y Conflictos sociales activos.
En esta primera edición, el Pilar de Institucionalidad Sólida muestra una clara tendencia negativa, que es incluso más fuerte en los últimos dos años. Esto, en línea con un deterioro en la calidad de la administración pública y la fortaleza y representatividad de la democracia. Además, el indicador de seguridad y orden interno muestra un deterioro marcado en los últimos cinco años.
Indicador del Pilar Crecimiento Económico Sostenible e Inclusivo
Por su parte, el indicador del Pilar Crecimiento Económico Sostenible e Inclusivo está compuesto por seis indicadores: Confianza para invertir; Percepción de progreso; Inflación; Intereses de deuda pública; PBI; Empleo formal Urbano; Percepción de opinión pública sobre si consideran que las empresas están contribuyendo al desarrollo del país (de mi región); Percepción de opinión pública sobre integridad y honestidad de las empresas del sector privado.
En este caso, muestra una clara tendencia de deterioro en la última década, acentuada fuertemente durante la pandemia. Este deterioro a nivel agregado se ve reflejado también en sus componentes. Si bien los principios de Libertad Económica y Economía Competitiva, Formal, Sostenible e Inclusiva mostraron cierta mejora este año, todavía se encuentran muy lejos de su nivel antes del golpe de la pandemia.
Al mismo tiempo, el deterioro del principio de Manejo Macroeconómico Responsable se acentuó en el 2022, en línea con una inflación más elevada, entre otros factores.
Indicador del Pilar de Educación de Calidad
El indicador del Pilar de Educación de Calidad está compuesto por nueve indicadores: Cambios de Ministro de Educación; Presupuesto ejecutado del sector educación para inversión y compra de bienes y servicios; Locales escolares públicos con tres servicios básicos; Tamaño promedio de clase (educación primaria, urbano); Tamaño promedio de clase (educación primaria, rural); Profesores nombrados a través de concurso público; Estudiantes 2do/4to de primaria con rendimiento satisfactorio en lectura y matemáticas; Tasa neta de matrícula, educación inicial (edades 3-5); y Tasa de transición a educación superior.
Este caso se observa un deterioro significativo en el periodo entre el 2015 y 2021. Esto es consecuencia de los indicadores de aprendizaje, docentes, y calidad de las instituciones educativas y del sistema.
Es importante destacar algunos indicadores como la tasa neta de matrícula en la educación inicial, que ha retrocedido 7 años al nivel del 2014; y la tasa de transición a la educación superior que ha tenido su mayor deterioro en los años 2020 y 2021, alcanzando cifras que no se tenían en más de una década.
Indicador del Pilar Igualdad de Oportunidades
El indicador del Pilar Igualdad de Oportunidades está compuesto por 12 indicadores: Población en situación de pobreza; Hogares con acceso a agua, saneamiento básico y electricidad; Número de profesionales de salud por cada 10 000 personas; Niños menores a 3 años con esquema de vacunación completo; Salario promedio del sector privado; Cartera administrada por AFP entre trabajadores urbanos; Población que accede a internet en el hogar; Colegios con acceso a internet; Implementación de política de equidad de género; Mujeres CEO; Mujeres en 1er nivel; y Brecha salarial por género.
En este caso, se ha mostrado mucha volatilidad en la última década, pero con información al 2021, no se ven señales de una mejora sostenida. Esto se ve reflejado en el estancamiento de la inclusión social y lucha contra la pobreza; y la equidad, inclusión y diversidad en las empresas, entre otros.
Además, la pandemia implicó un retroceso importante en la evolución de indicadores de mercado laboral. En contraste, destaca la mejora, impulsada también por la pandemia, del proceso de digitalización de la ciudadanía.