Redacción Gestión

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(Bloomberg View).- Hay tres cosas que deben saberse sobre la reunión del miércoles del Comité Federal de Mercado Abierto, el órgano normativo supervisado de cerca por la .

1. Es probable que los funcionarios de la Fed preparen el terreno para una posible alza en las tasas de interés en su próxima reunión, en junio. Estarán motivados principalmente por tres factores: un mayor fortalecimiento en las condiciones del mercado laboral que también mejora las perspectivas de crecimiento del salario; la reciente y significativa flexibilización de las condiciones financieras, incluyendo un acceso más fácil a los préstamos para las empresas y la financiación de hipotecas y, en términos más generales, la ansiedad del banco central por continuar con el proceso de una cuidada normalización de la política monetaria después de tantos años de experimentación.

La Fed, sin embargo, no va a descartar ninguna opción de política a esta altura. Los funcionarios dejarán en claro que sus decisiones, incluso la posibilidad de elevar las tasas en junio, seguirán "dependiendo de los datos". En consecuencia, señalarán que un alza en junio no es algo seguro, sino algo que habrá evolucionado de menos a más probable.

2. La postura condicional de la Fed depende menos del contexto local que de lo que suceda en el resto del mundo – la desaceleración económica, la incertidumbre en relación a temas no vinculados con la economía, como el referéndum del Reino Unido el 23 de junio para determinar si abandona la Unión Europea. La "vieja" Fed –una institución que estaba más orientada a lo local y dispuesta a liderar los mercados– habría decidido elevar las tasas en esta reunión. De hecho, algunos funcionarios (aunque no la mayoría) se prestarían fácilmente a hacerlo el miércoles.

Pero el alto grado de incertidumbre internacional y algunas valoraciones excesivas hacen que la Fed se muestre reacia a sorprender a los mercados –especialmente cuando los trastornos experimentados por el mercado en enero y principios de febrero todavía están frescos en la memoria.

3. A pesar de que la Fed concentrará la atención de los participantes del mercado, el acontecimiento más interesante esta semana puede ser la reunión del Banco de Japón, el jueves. El banco central japonés se enfrenta a una decisión política extremadamente compleja, amplificada por las presiones a la baja sobre las expectativas inflacionarias y la reciente apreciación de la moneda. En ambos casos se acentúa la amenaza de una profunda trampa deflacionaria.

No obstante, a juzgar por las respuestas a las anteriores resoluciones del banco –entre ellas la sorpresiva reducción a tasas nominales negativas--, parece ser que esta institución monetaria es la que se ha movido más cerca de la línea de peligro, ya que su intervención no solo está siendo ineficaz sino hasta contraproducente. En consecuencia, su accionar será observado de cerca por otros, en particular por el Banco Central Europeo, cuyos funcionarios están preocupados, y con razón, por la posibilidad de dirigir sus pasos en la misma dirección cuando expandan sus políticas no convencionales.

Por Mohamed A. El-Erian.