Los inversionistas en bonos están evitando los mercados emergentes de Asia mientras la resistencia de la región a la amenaza de la inflación mundial muestra signos de resquebrajamiento.
Abrdn plc ahora tiene una posición de subponderar en la deuda asiática y SEB AB se volvió más cauteloso, mientras que Goldman Sachs Group Inc. observa un incipiente ciclo de aumentos de tasas para hacer frente a las presiones de precios que han provocado el mayor aplanamiento de sus curvas de rendimiento en el mundo en desarrollo. Los bonos soberanos asiáticos se encuentran entre los de peor desempeño en un indicador de deuda en moneda local, y hay quienes dicen que las pérdidas recién comienzan.
“Estamos desconfiando de los bonos asiáticos por el deterioro del contexto de inflación”, dijo Eugenia Victorino, jefa de estrategia para Asia de Skandinaviska Enskilda Banken AB en Singapur. “Aunque la demanda interna en la región todavía se está recuperando, el contexto inflacionario provocará que incluso los bancos centrales más reacios adopten medidas más restrictivas”.
El escepticismo de los inversionistas respecto de Asia se ha acentuado esta semana luego que la inflación estadounidense, que fue peor de la esperada y se sitúa en el nivel más alto de los últimos 40 años, golpea a los activos mundiales.
En las primeras horas de la sesión del lunes, los bonos de los países que no se han preparado para el endurecimiento de la Reserva Federal con sus propias alzas de tasas —como Indonesia y Tailandia— registraron algunas de las peores pérdidas.
Dado que se espera que la Fed aumente los costos de endeudamiento más rápido de lo que se preveía, estas naciones asiáticas están expuestas al riesgo de una fuga de capitales y a una desaceleración más brusca del crecimiento que otros países como Brasil, que han sido proactivos.
Incluso un pequeño rebote en el último mes ha obviado en su mayor parte a la región: los valores de Asia Central son el único grupo que ha perdido dinero, mientras que los de Asia-Pacífico han ido a la zaga de sus homólogos de América Latina y África, según los datos de un índice de Bloomberg. Solo la deuda de Europa del Este, sumida en el conflicto, ha tenido un peor desempeño, y la reciente racha de datos de inflación que han sorprendido al alza empeorarán el bajo rendimiento de Asia.
En general, los países que se considera que ingresaron tarde al ciclo de subidas de tasas están siendo castigados.
La decisión de India en febrero de no elevar los costos de endeudamiento por la apuesta de que la inflación se ralentizaría resultó efímera y el país se vio obligado a optar por un endurecimiento de 90 puntos básicos. Sus rendimientos a corto plazo están mostrando la impaciencia de los inversionistas con el ritmo, saltando un punto porcentual desde principios de mayo. Rendimientos similares en Tailandia subieron 70 puntos básicos en el mismo periodo, ya que la nación no ha subido las tasas desde el 2018.
Los inversionistas institucionales globales, que habían sido alcistas sorbe Asia a fines del año pasado en medio de las expectativas de una recuperación del crecimiento, se están volviendo escépticos. El mercado de renta fija de la región obtuvo una calificación de sentimiento neto del 6% en la encuesta de mercados emergentes de junio de HSBC, en comparación con el 31% de América Latina. La puntuación de Asia ha bajado desde el 16% de marzo.
Presión en Asia
Los cuellos de botella en la cadena de suministro debido a los cierres en China están exacerbando la presión inflacionaria en la región, ya que China es el socio comercial dominante de muchas naciones asiáticas.
La inflación de Tailandia se aceleró al 7.1% en mayo, superior al 5.9% previsto por los economistas y el nivel más alto desde el 2008. En Indonesia, los precios al consumidor subieron al ritmo más rápido desde el 2017 en el mismo mes, mientras que la inflación en Corea del Sur ha superado la estimación de los economistas cada mes desde enero.
Por el contrario, hay algunas señales tempranas de que la inflación podría estar cerca de alcanzar su punto máximo en Brasil y México.
“La inflación tocará techo al final en Asia”, dijo Edwin Gutierrez, jefe de deuda soberana de mercados emergentes con sede en Londres de abrdn, que supervisa alrededor de US$ 677,000 millones.
Ese repunte de la inflación está empujando a los bancos centrales de la región a actuar, uniéndose a sus pares en América Latina y Europa del Este en el incremento de las tasas para combatir las presiones de precios.
El banco central de India finalmente señaló que se avecinan más aumentos de tasas después de realizar un segundo incremento consecutivo la semana pasada, mientras que en Filipinas se prevén al menos dos alzas más después de que los responsables de la política monetaria subieran las tasas por primera vez desde mayo del 2018. Malasia también aumentó el mes pasado los costos de endeudamiento por primera vez en cuatro años.
Incluso los bancos centrales asiáticos que aún no se han sumado al ciclo de endurecimiento global están ahora bajo presión. El Banco de Tailandia ha señalado que se avecina una subida después de que la inflación alcanzara su nivel más alto en 14 años, y se espera que el Banco de Indonesia suba los tipos en los próximos meses.
“Las revisiones al alza de las previsiones de inflación en los mercados emergentes de Asia están empezando a ponerse al día con el resto de los mercados emergentes”, escribieron analistas de Goldman encabezados por Kamakshya Trivedi en un informe del 8 de junio. “Dada la postura más moderada en las curvas de los mercados emergentes de Asia, esto se ha traducido en un bajo rendimiento persistente de las tasas en los últimos meses”.