Las acciones vinculadas al cobre pueden estar activas el jueves en tanto una de las minas de cobre más grandes del Perú está paralizando sus operaciones después de no lograr un acuerdo para poner fin a las protestas comunitarias en otro golpe a la industria local y al suministro mundial de metales.
El cobre saltó, recuperándose del cierre más bajo en más de dos meses.
El cobre está liderando un amplio avance entre los metales básicos impulsado por la especulación de que el endurecimiento de la política de la Reserva Federal combatirá la inflación sin descarrilar el crecimiento.
Algunas mineras en Europa con exposición al cobre incluyen Antofagasta, KGHM, Lundin Mining así como las empresas de procesamiento como Aurubis y Boliden.
En Asia, MMG descendió hasta un 12% en Hong Kong, la mayor caída desde el 19 de agosto; otros actores clave en cobre cambiaron poco.
En América del Norte, están en la mira Freeport-McMoRan, First Quantum, Hudbay, ERO Copper y Southern Copper.
Las Bambas
Una de las minas de cobre más grandes de Perú cerrará sus operaciones después de que no lograra llegar a un acuerdo para poner fin a las protestas comunitarias, asestando otro golpe para la industria local y el suministro mundial de metales.
La mina Las Bambas no podrá seguir produciendo cobre a partir del sábado, en tanto que se quedará sin insumos clave debido a los cortes de ruta, dijo en un comunicado su propietario, MMG Ltd., que cotiza en Hong Kong. La instalación comenzó a detener algunas operaciones de procesamiento el miércoles como parte de un cierre gradual, según una persona informada sobre el asunto.
Las Bambas es la segunda mina peruana que suspende la producción esta semana después de que Nexa Resources SA interrumpiera las operaciones en Cerro Lindo, aunque la primera ministra Mirtha Vasquez dijo el miércoles que la policía había dispersado a los manifestantes en esa operación de zinc.
Desde que llegó al poder en julio, el presidente Pedro Castillo ha tenido que lidiar con un repunte en los disturbios sociales, en tanto que las personas que viven a lo largo de las rutas de transporte buscan una mayor parte de las ganancias inesperadas, mientras que las comunidades rurales en otros lugares luchan contra la minería por preocupaciones ambientales.
El mes pasado, los pequeños agricultores de la provincia de Chumbivilcas reanudaron los bloqueos en un intento por restablecer el control sobre una carretera que Las Bambas usa para transportar su cobre en camiones al puerto. El 3 de diciembre, MMG dijo que las operaciones quedarían suspendidas a mediados de mes si las conversaciones con el Gobierno y los líderes comunitarios no daban frutos.
”El pueblo y las mineras no logran ponerse de acuerdo”, dijo Vásquez a los periodistas el miércoles.
El cierre prolongado en una mina que antes de la pandemia representaba casi el 2% del cobre extraído a nivel mundial reduciría aún más los suministros globales que se han visto afectados por los problemas de transporte y los bajos inventarios de los almacenes. Actualmente, Las Bambas tiene 60,770 toneladas de cobre varadas en el sitio.
Para Castillo, un exactivista rural que ya ha sobrevivido a un intento de destitución, las tensiones mineras subrayan sus desafíos más amplios, por lo que necesita apaciguar a las facciones más moderadas de la política peruana para impulsar los aumentos de impuestos propuestos, a medida que mantiene el apoyo de las facciones más duras de su partido marxista y de los votantes rurales que lo pusieron en el poder.