Los inversores acumularon acciones y abandonaron activos como el efectivo, oro y bonos, considerados refugios seguros, en la semana hasta el miércoles, dijo Bank of America (BofA) en su reporte semanal sobre flujos del mercado.
Los fondos de acciones atrajeron US$ 30,500 millones, mientras que los fondos de bonos sufrieron su primera salida en cuatro semanas con US$ 2,900 millones, los fondos en efectivo perdieron US$ 43,500 millones y el oro cedió en US$ 100 millones, dijo BofA en su nota basada en datos de EPFR.
En renta fija, los fondos de bonos de grado de inversión y de alto rendimiento sufrieron sus mayores salidas en cuatro semanas con US$ 3,100 millones y US$ 2,000 millones respectivamente, encontró BofA.
En renta variable, las acciones estadounidenses atrajeron US$ 9,000 millones, mientras que los mercados emergentes registraron entradas por cuarta semana consecutiva, recaudando US$ 6,700 millones.
“La inflación desbocada, lo altos precios del petróleo, los cuellos de botella en el suministro y la tasa de desempleo entre el grupo G7 en mínimos de cerca de 40 años equivalen a crecimiento salarial”, escribió Hartnett, y agregó que esto significa que el impacto de las tasas de interés será global en el 2022.
Mientras tanto, había poca mejoría a la vista para el dólar.
“El dólar estadounidense cayó a pesar del 7% de inflación (en Estados Unidos), menos de 4% de desempleo, la Reserva Federal detrás de la curva porque los inversores globales piensan que Estados Unidos se desacelerará rápido”, dijeron analistas del banco estadounidense.