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Las acciones de los mayores productores de litio del mundo cayeron en picada el miércoles tras los anuncios del ‘Battery Day’ de Tesla Inc. que no estuvo a la altura de las expectativas.
En el anticipado evento, Elon Musk presentó mejoras planificadas para su tecnología de baterías que reduciría el uso de litio. Para empeorar las cosas, Tesla también dijo que planeaba ingresar al negocio de la minería. Las acciones de Albemarle Corp., SQM y Lithium Americas Corp. cayeron en más de 10%.
Las presentaciones decepcionaron a los inversionistas que buscaban indicios de que baterías más baratas impulsarían la penetración de los vehículos eléctricos y la demanda de litio. Ese optimismo se convirtió en preocupación, dado que las nuevas tecnologías anunciadas podrían reducir el uso de litio, escribió Javier Martínez de Olcoz Cerdán, de Morgan Stanley.
Los pasos anunciados por Tesla hacia la integración vertical podrían atenuar aun más el panorama sombrío para los productores de litio.
“Creemos que las expectativas apuntaban a una sorpresa alcista sustancial para las perspectivas del litio, pero no sucedió”, comentó en una nota Aleksey Yefremov, de KeyBanc.
Las acciones de Albemarle bajaron 12% a las 11:10 a.m. en la Bolsa de Nueva York, mientras que Sociedad Química y Minera de Chile SA había perdido 10%. La venta masiva deshizo las ganancias de los últimos dos meses que fueron impulsadas por las expectativas de una recuperación en los precios del litio después de que el crecimiento de la oferta superó la demanda, lo que provocó un exceso global.
Si bien Albemarle dijo el mes pasado que inactivaría parte de la producción de grado de batería, el principal proveedor de litio reiteró su perspectiva de demanda a largo plazo, citando nuevos incentivos basados en el consumidor en Europa además de las iniciativas ecológicas existentes a nivel mundial.
El martes, Tesla dijo que comenzará la extracción de litio en Nevada. Junto con el reciclaje de baterías y la producción de cátodos, esto creará una cadena de suministro integrada dentro del país.
“No creemos que estas iniciativas representen una amenaza fundamental a corto plazo para Albemarle, pero sí creemos que el sentimiento negativo podría pesar sobre la acción, que posiblemente ya estaba muy valorada”, escribió Ben Kallo, analista de Robert W. Baird & Co.