En nuevo contexto de la realidad post COVID-19, las habilidades de los trabajadores se tornan más hacia lo digital, por lo que de no adaptarse al nuevo escenario, las empresas pueden desvincular a aquellos trabajadores que no se encuentran a la par con los cambios.
En ese sentido, un estudio de Talent Solutions, firma especializada de ManpowerGroup, señala que el 80% de personas desvinculadas de sus centros de trabajo ha indicado que dicha situación impacta en su autoestima y salud mental.
En diálogo con Gestión.pe la directora de Talent Solutions, Silvana Cárdenas, indicó que frente a este escenario el trabajador debe realizar dos acciones.
La primera es conocer lo que están buscando las empresas del rubro donde estuvo trabajando, ya sea nuevas competencias, comportamientos o valores. La segunda acción, explica, es mirar hacia uno mismo y ver cuáles son las competencias que tiene y que se adapta a lo que está buscando esas organizaciones.
“Tiene que ver lo que le falta, lo que no ha desarrollado aún y tendría necesariamente que desarrollar si quiere continuar siendo empleable, desarrollar las habilidades y conocimientos. Luego de identificarlo, debe empezar a trabajar en ello”, sostuvo.
Explicó que hoy en día en las compañías se habla del mayor uso de la tecnología, sustentabilidad, inclusión, entre otros nuevos conceptos, los cuales implica que los trabajadores también deban aprenderlo.
“En tanto el colaborador no se prepare, no esté dispuesto a mejorar las habilidades o conocimientos, poco a poco irán quedando obsoletos y por eso también se han dado varias desvinculaciones”, apuntó.
Tres opciones
La ejecutiva indica que tras la desvinculación del trabajador en las compañías, estos pueden optar por tres alternativas hasta que encuentre un nuevo empleo.
La primera de ellas está relacionado a realizar un emprendimiento, paralo cual es importante evaluar la viabilidad de una idea de negocio y la viabilidad financiera. Y es que según dijo, la pandemia activó el “sueño emprendedor”, tras el despido de los trabajadores ante el cierre de varias empresas.
Sin embargo, también dijo que esta alternativa es considerada por aquellas personas que consideran que les tomará demasiado trabajo adaptarse a las nuevas habilidades en la nueva realidad post pandemia.
“Por ejemplo en las habilidades digitales, hay algunos que no son nativos digitales y al identificar que ahora se están buscando esos perfiles, lo consideran tan difícil de desarrollar que deciden emprender. Y para emprender también se requieren habilidades diferentes”, dijo.
Otro punto es optar por un programa de empleabilidad hacia miras de recolocarse en un nuevo puesto de trabajo en alguna compañía.
Cárdenas señala que muchas empresas se han visto con dificultades para atraer a nuevos talentos, por lo que nuevamente hace hincapié en desarrollar habilidades y conocimiento que requiere el mercado.
Señala que en muchos casos, las empresas terminan contratando a las mismas personas que desvincularon debido a que durante ese periodo de desempleo desarrolló las habilidades requeridas.
En este punto es importante el entrenamiento para entrevistas de trabajo, el networking y uso de redes sociales para empleo como LinkedIn.
Una tercera opción, menciona, es optar por programas de jubilación, en donde los trabajadores ya no buscan recolocarse, sino, optar por inversión del capital que pueden haber ahorrado durante el tiempo que estuvo laborando. Esta inversión no necesariamente es un emprendimiento, aclara la ejecutiva.
De igual manera, precisó que hay empresas que tras la desvinculación de trabajadores otorgan un proceso de outplacement (recolocación).
Datos y cifras
-Entre 1 y 4 meses es el tiempo que toma encontrar un nuevo empleo en Perú. Sin embargo, el periodo puede variar de acuerdo al sector laboral. Por ejemplo, en el sector de Tecnologías de la Información (TI) la recolocación es de 2 meses.
-Un 20% afirma conocer cómo estructurar una estrategia de búsqueda laboral para logra ser contratado en el menor tiempo posible.