En el Perú, por cada 10 personas que laboran, prácticamente 8 no tienen beneficios o no ganan ni siquiera el sueldo mínimo, y no hablamos de los trabajadores que están en una empresa, sino de la informalidad laboral que en el país llega al 77%, la cifra más alta en 11 años, según el Instituto de Estudios Económicos y Sociales (IEES) de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI).
Este número es el más alto entre los países de la región como Chile, cuya informalidad laboral llega al 27%, Colombia en 48% o México en 56%.
Y si revisamos los ingresos promedios de los trabajadores, aún no se recupera los ingresos de niveles prepandemia, ubicándose 6% por debajo del 2019; es decir, S/ 103 menos, de acuerdo con las últimas cifras del INEI en Lima.
Así, según el INEI, se tiene alrededor de 14 millones de personas en el país sin ningún beneficio, con bajos ingresos y sin que les llegue la norma del sueldo mínimo, un número que parece que podrían crecer si no se adoptan medidas.
Agenda laboral, sin diálogo
El Gobierno de Pedro Castillo fijó una orientación al trabajador, pero solo al formal, excluyendo a los informales (14 millones de personas), plasmado ello en la llamada Agenda 19 con Iber Maraví, buscando solo beneficios para los trabajadores sindicalizados, sin conversaciones con los empleadores.
Y, en el caso de la gestión de Betsy Chávez, se establecieron medidas con poco o ningún diálogo social entre los trabajadores y empleadores, pese a las reuniones previas con el Consejo Nacional de Trabajo (CNT).
Una de las medidas que tuvo que retroceder el Ministerio de Trabajo y Promoción del Empleo (MTPE) ha sido para tener una mayor conversación para el anteproyecto del Código de Trabajo, tras un pedido de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
El perfil esperado
Ante las cifras de baja generación de empleo o ingresos que no se recuperan, Nancy Laos, exministra de Trabajo, considera que la primera tarea debe ser priorizar las acciones para reducir la informalidad laboral y enfocarse en el trabajo juvenil.
Así, desde su punto de vista, la persona que asuma debería tener experiencia en políticas laborales.
Germán Lora, abogado laboralista, comenta que el ministro tiene que ser una persona más equilibrada en las normas laborales, una clara orientación a las relaciones laborales, y más técnica, no solo de su lado, sino de todo el equipo ministerial.
Luis Santa Cruz, laboralista del estudio Miranda & Amado, remarca que debe ser una persona que busque consenso entre los trabajadores y empleadores.
Desde el gobierno, el sesgo de los nombramientos al mando del MTPE ha sido buscar personas que protejan a los trabajadores, marcando distancia con los empleadores.
En ese sentido Nancy Laos, comenta que, “hay que pensar en el trabajador, pero tiene que haber un equilibrio, ya que, si no hay puesto de trabajo, no hay trabajador”, invitando a un diálogo en ambos sentidos.
Medidas urgentes
¿Qué acciones debería tomar la persona que asuma el MTPE? En esa línea hay un consenso en los especialistas en adoptar medidas para reducir la informalidad laboral.
Nancy Laos plantea que deben establecerse metas concretas, como por ejemplo que la informalidad se reduzca al 70%, lo que implica dar incentivo para la contratación, pero ello debe ser de manera transversal.
“Se quiere dar incentivos solo a la micro y pequeña empresa, sino también a la gran empresa, porque la gran empresa tiene el efecto de impulso hacia las pequeñas y microempresas”, mencionó.
Otra de las medidas, es apuntar al empleo juvenil, por ejemplo, con subsidios en aportaciones de Essalud, recordando lo que se propuso hace algún tiempo atrás y no se llegó a implementar.
Además, programas de trabajos temporales de emergencia, “la juventud no tiene oportunidades en el país”, indicó.
Por su parte, Germán Lora comenta que, en medio de la crisis de la pandemia y ahora la crisis internacional por alza de materias primas, se tiene que generar un aire a las empresas.
Desde hace tiempo considera que se debe darse normas para un régimen de emergencia para crear empleos formales, que enganchen en el régimen general, solo por un periodo de tres años.
“No solo que sea temporal o que los beneficios sean menores, sino que haya una actuación importante de la Sunafil para el cumplimiento, sin que sea para multar o hacer cobranzas coactivas”, expresó.
A su turno, Luis Santa Cruz menciona que se deben revisar las normas de régimen especial para reducir la informalidad. “Sin ello solo se seguirá mirando al mismo grupo de trabajadores”, dijo.
TEMA sobre la mesa
- Uno de los temas que está en la agenda es el Código de Trabajo, cuyos comentarios para el anteproyecto ya se han recibido y ahora toca la discusión de las medidas al interior del Consejo Nacional de Trabajo, antes de ser presentado al Congreso para su propio debate interno. Sobre este tema los especialistas coinciden es que debe darse un mayor debate
- Con la censura a Betsy Chávez, ahora no solo regresará la ministra de Trabajo al Congreso, sino que Sunafil se ha quedado sin sus principales funcionarios, tras la renuncia masiva del superintendente, intendentes, gerenta general y asesores. La tarea que comparten los especialistas es que no debe politizarse, sino que debe ser una entidad técnica.