Mediante un Decreto Supremo publicado hoy en el diario oficial, el Gobierno publicó el reglamento de la Ley para la prevención y tratamiento de la enfermedad de Alzheimer y otras demencias.
Como se recuerda, la ley establecía el derecho de los familiares directos y cuidadores a cargo de la atención de los pacientes con enfermedad de Alzheimer y otras demencias, a solicitar a su empleador hasta una jornada laboral de permiso remunerado al año, a fin de atender las necesidades del paciente.
Al respecto, el Reglamento señala que:
- Se considera familiar directo a los hijos, padre o madre; cónyuge o conviviente del paciente.
- Otras demencias que también generan el derecho al permiso: Son otras enfermedades degenerativas primarias (demencia: fronto temporal, con cuerpos de Lewy, asociada a enfermedad de Parkinson, por enfermedad de Huntington); secundarias (demencia: vascular, infecciosa, carencial, endocrino-metabólica, toxicológica o por otras patologías médicas); y las combinadas o mixtas (demencia de etiología múltiple); todas las cuales generan discapacidad crónica. Asimismo, se considera a la enfermedad de alzheimer de aparición temprana autosómica dominante y a la enfermedad priónica familiar tipo alzheimer”.
- El permiso remunerado es otorgado hasta por una jornada laboral al año, pudiendo gozarse por horas. Para su disfrute, el trabajador debe presentar a su empleador con una anticipación mínima de 72 horas al día que pedirá permiso, lo siguiente: a) Una comunicación escrita por medio físico o correo electrónico dirigida al empleador solicitando el otorgamiento del permiso remunerado e indicando la fecha, cantidad de horas requeridas y los hechos que lo motivan.
b) En el caso de familiar directo, la documentación que acredita su vínculo con el paciente con enfermedad de Alzheimer y otras demencias.
c) En el caso del cuidador, la designación vía notarial, certificado médico, informe médico, constancia policial o certificado domiciliario respectivo.
- Entre las Facilidades laborales extraordinarias a las que pueden acceder los familiares y cuidadores de los mencionados pacientes, el dispositivo bajo comentario considera a las siguientes:
a) Ajustes en la jornada, horario y/o turnos de trabajo.
b) Cambio de la modalidad presencial de trabajo a la de teletrabajo, total o parcial.
c) Permisos remunerados adicionales; y/o permisos sujetos a compensación o descuento.
d) Licencias con goce o sin goce de haber; o licencia a cuenta del periodo vacacional u otorgamiento de adelanto de vacaciones.
e) Otras facilidades que se otorguen de común acuerdo con el empleador. Las reglas de otorgamiento de estas facilidades las determina el empleador.
- Si en una misma empresa laboran más de un familiar directo o curador de un mismo paciente, estos tendrán derecho al permiso.
- Los empleadores del sector público y privado tienen la facultad de fiscalizar el uso debido del permiso remunerado y las facilidades laborales extraordinarias antes señaladas,para lo cual los trabajadores deben prestar la debida colaboración.
- De acuerdo con las circunstancias de cada caso concreto, el uso del permiso remunerado y las facilidades laborales extraordinarias para fines distintos a los previstos en la normativa puede ser calificado como una falta disciplinaria, aplicándose las consecuencias previstas para cada régimen laboral.
Al respecto, el abogado laboralista César Puntriano, dijo que si bien la finalidad de la norma es loable pues permite a lo trabajadores asistir a sus familiares o dependientes con Alzeheimer u otras demencias, lo recomendable sería establecer una bolsa de días de permiso al año.
"Dicha bolsa debería incluir las licencias por paternidad, maternidad, duelo por fallecimiento de familiares, atención de familiares en estado terminal, entre otros casos. Esto permitiría que el trabajador pueda dosificar los permisos según sus necesidades y que el empleador conozca de antemano el número de ausencias que tendrá el trabajador durante el año", comentó.