Esta semana el ministro de Trabajo, Iber Maraví, en su presentación en el Congreso anunció que en su agenda de medidas priorizadas se encuentra una que buscará la condonación de las horas por compensar de los trabajadores de riesgo en el sector privado.
LEA TAMBIÉN: Los cambios laborales que pretende el Ministerio de Trabajo
Cabe recordar que desde el inicio del periodo de emergencia sanitaria debido al COVID-19 una norma emitida por el Gobierno estableció que los trabajadores de riesgo (mayores de 65 años o con comorbilidades) que no puedan laborar de forma remota debido a la naturaleza de sus funciones, pasarían obligatoriamente a un periodo de licencia con goce de haber, sujeta a una compensación posterior.
La propuesta de condonación de las horas por compensar no solo afectaría las finanzas de las empresas, sobre todo de las micro y pequeñas empresas (mypes), sino que también podría perjudicar a este grupo de trabajadores pues se induciría a sus futuras desvinculaciones, advirtieron analistas.
El socio líder de Servicios Laborales de PwC, Percy Alache, refirió que esta medida podría generar un efecto “búmeran” para este grupo de trabajadores, ya que representarán un mayor costo para los empleadores, pues no solo habrán recibido un pago sin trabajar ni compensar en este año y medio de pandemia, sino que este periodo se podría aún ampliar más si la emergencia sanitaria se prolonga con nuevas olas de contagios del COVID-19.
“Las empresas podrían desvincular a estas personas o tomar medidas para evitar que sigan haciendo carrera en la empresa, pues significarán un mayor costo. Se generará un efecto búmeran; si ya no se compensarán las horas no laboradas, ellos serán los primeros en una futura lista de desvinculación”, subrayó.
Por su parte Pamela Navarro, Directora de Atalla Legal, advirtió que una medida de este tipo afectará duramente las finanzas de las mypes, pues no cuentan con las espaldas financieras para sostener este costo y las empresas contaban con la recuperación de las horas no laboradas.
“La medida podría ser catastrófica para las empresas, sobre todo para las mypes. Muchas empresas quebrarían, no podrán resistir este golpe”, remarcó.
La especialista agregó que la medida también generaría un trato no igualitario entre los trabajadores, pues algunos de ellos ya han retomado actividades y están compensando las horas no laboradas.
Refirió que se han establecido acuerdos con el empleador para trabajar horas extras o compensar con vacaciones o gratificaciones. Incluso algunos de quienes aún no retoman labores ya están compensando en parte con una reducción temporal de sus remuneraciones, indicó Navarro.
“De darse esta medida, tendríamos a un grupo que está compensando, pero otro grupo no compensará nada; habrán tenido un año y medio de sueldo gratis, sin trabajar”, apuntó Navarro.
Los especialistas coincidieron en que este tipo de cambio en las reglas de juego también generará más informalidad en el mercado laboral.
Sugirieron como alternativa que el Estado pueda subsidiar a las empresas parte de las horas que los trabajadores ya no compensarían.
“Si el Estado considera que la cantidad de horas pendientes de compensar por un trabajador es muy alta, que subsidie una parte, pero no se puede trasladar todo el costo al empleador”, anotó Navarro.