La empresa inmobiliaria china Shimao, cuya situación financiera está en peligro, puso en venta unos US$ 12,000 millones de activos para sanear su tesorería, afirmó el medio económico Caixin.
Los grupos inmobiliarios en China se encuentran en una situación delicada desde que las autoridades impusieron medidas en el 2020 para sanear un sector lleno de deudas y marcado por la especulación desenfrenada de los particulares.
Los problemas del gigante Evergrande, al borde de la bancarrota, han enfriado el entusiasmo de los posibles compradores, lo que penaliza al sector inmobiliario y pone en aprietos a los promotores.
Shimao, el decimotercer promotor inmobiliario de China, puso en el mercado 34 proyectos en 17 ciudades, entre ellas Pekín y Shanghái, según Caixin.
Estos activos incluyen proyectos residenciales y oficinas, así como un complejo hotelero en Shanghái, precisa el medio, que dice haber tenido acceso a documentos internos.
Estas informaciones dispararon brevemente el martes a más de 7% la acción de Shimao en la Bolsa de Hong Kong. Al cierre, sin embargo, terminó cediendo 1.3%.
La empresa cuenta con alrededor de US$ 10,100 millones en obligaciones en circulación en China y el extranjero.
Según la agencia de información financiera Bloomberg, Shimao y sus filiales tendrán que devolver este año US$ 2,500 millones de obligaciones que llegan a vencimiento.