Tras nuevos casos de la variante ómicron surge una nueva disposición del Gobierno, de reducir el aforo en los establecimientos hasta un 60% durante las fiestas de Navidad y Año Nuevo, indicó el ministro de Salud, Hernando Cevallos.
El anuncio indica que se trata de días puntuales, noticia que no ha caído bien al sector turismo, quienes se verán obligado a cancelar las reservas para esas fechas.
Blanca Chávez, presidenta de la Asociación de Hoteles y Restaurantes del Perú (Ahora Perú) describe que esta disposición afectaría al 20% de las reservas en restaurantes, solo si es que la norma contempla que el aforo en las terrazas se mantenga.
Mientras que, en el caso de los hoteles la anulación de reservas podrían llegar hasta un 50% en las principales cadenas.
Medidas inciertas
Juan Stoessel, director del Comité de Turismo de ComexPerú, considera que lo más grave es que los anuncios se realizan de un momento a otro, lo que no permite la planificación para los turistas, y la incertidumbre continúa dado que se ha genera el anuncio sin conocerse los detalles.
“Estas últimas semanas del año estamos en el ‘pico’ de la demanda de todo el año, y ahora surge anuncio”, remarcó, tras recordar que esta medida es similar a la ocurrida hace unos meses con el pedido de las pruebas PCR para los turistas extranjeros.
Hoteles y sus cancelaciones
“Ahora, ¿a quién le decimos que no? ¿A quién cancelamos la reserva? ¿Al turista peruano o al extranjero?”, comenta Juan Stoessel, gerente general de Casa Andina y director del Comité de Turismo de ComexPerú.
Explica que, ya se ha mostrado que con este tipo de medidas de restricciones no alivia la propagación del virus ya que si no se reúnen el 25, lo harán un día antes, y por el contrario lo que se afecta al negocio formal, porque a los negocios informales no se les fiscaliza.
“Lo que ha funcionado hasta el momento es la vacunación, no las restricciones, lo que afecta la economía”, remarcó.
Reactivación externa ¿y en Perú?
José Luis Silva Martinot, representante de la Unión de Gremios y Asociaciones de Restaurantes del Perú, comentó que esta medida se ofrece cuando el Perú ha sido reconocido como el mejor Destino Gastronómico la semana pasada.
“En lugar de establecer nuevas medidas para promover, se establecen restricciones”, indicó.
Silva mencionó que hace un año perdimos este reconocimiento por Colombia, y ahora dicho país ha dado exoneración en el IGV a su sector para sostenerlo, pero ello no ocurre en el Perú.
Informalidad sin regulación
Otra de las medidas que afecta al sector, es que todas las restricciones y la fiscalización se establece al sector formal, comenta Gabriela Fiorini, presidenta del Gremio de Turismo de la Cámara de Comercio de Lima (CCL).
“No hay una fiscalización a los restaurantes y hoteles informales, ni se observa el cumplimiento de las normas sanitarias”, mencionó.
José Carlos Saavedra, economista principal de Apoyo dijo en RPP que la ampliación del toque de queda de manera permanente reduce en 15% el PBI en restaurantes y en 8% el empleo, siendo las más afectadas las mujeres, dado que representan el 70% de esta fuerza laboral.