El Fondo Monetario Internacional (FMI) calcula que el impuesto mínimo global de 15% a las multinacionales acordado por 137 países en octubre aumentará la recaudación global por impuesto de sociedades un 5.7 % (unos US$ 150,000 millones anuales).
Según un análisis publicado este martes por la institución financiera internacional, la implementación de este acuerdo reducirá los incentivos de las empresas para mover sus beneficios de un lugar a otro, lo que repercutirá en un incremento de la recaudación.
Además, el hecho de que los países dejen de competir entre sí para bajar impuestos, podría aumentar la recaudación todavía más, en un 8.1% adicional, indicaron desde el Fondo.
También apuntó que estos aumentos en la recaudación deberán verse complementados con reformas fiscales a nivel doméstico en cada país que incluyan la reformulación de “incentivos fiscales ineficientes”.
En su análisis, el FMI celebró que el acuerdo permita cobrar impuestos a las multinacionales allí donde se encuentran sus clientes, aunque sus empleados estén en otro lugar.
“En un mundo en el que el comercio digital es muy común, esto es un avance que debe ser bienvenido”, indicaron.
En el marco de la cumbre de líderes del G20 en Roma el pasado 30 de octubre, los jefes de Estado o Gobierno de los países participantes acordaron un impuesto mínimo global a las multinacionales para equilibrar el sistema tributario internacional.
El mecanismo, que se adoptará para el 2030, sigue el camino ya trazado por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) de un sistema sustentado en dos pilares.
El primero fija que el volumen del beneficio residual de las empresas, es decir, el restante después de que el país donde esté la sede se haya quedado con el impuesto correspondiente al 10% de la rentabilidad, se repartirá entre las naciones donde operan.
El segundo establece un tipo mínimo de sociedades de 15% para las que tengan una facturación de al menos € 750 millones (unos US$ 812 millones).