La posibilidad que el sector belleza -actualmente ubicada en la Fase 4 de la reactivación económica (Agosto)- pueda adelantarse e ingresar a la Fase 2 (Junio), la ha dado la titular del Ministerio de la Producción (Produce), Rocío Barrios.
Para ello, durante esta semana la ministra se reunió con la ‘Asociación Juntos Por la Peluquería’, gremio que se ha creado para avanzar en los permisos correspondientes e ingresar a esta segunda etapa de reinicio de actividades, indicó a Gestión.pe el vocero de dicha asociación Nelson Sánchez.
Explica que el gremio está conformado por más de 100 salones de belleza, entras ellas las conocidas Montalvo y Soho Color, y la meta común es que cumplan los protocolos de bioseguridad para evitar contagios del COVID-19 durante la atención a clientes.
Agrega que dicho protocolo fue entregado el pasado 26 de abril, en tanto el martes 12 de mayo volvieron a tener una reunión con Barrios en la que identificaron observaciones al protocolo y que a la fecha se vienen levantando.
“Se ha calculado dos reuniones más y ya estaríamos en teoría listos para decir que arrancamos en la segunda fase. Si los salones no tienen todo listo porque deben ajustar algunas cosas, (algunos) empiezan en la segunda etapa, pero a la mitad de junio (quincena de junio). Además, todo de depende de cómo baje la cifra de contagios, dependemos de eso”, sostuvo.
Agregó que ya se ha realizado un 'mapeo’ respecto a la demanda de los servicios de estética, y por el lado de las mujeres lo que más se solicitará será el tinte para el cabello, y para los hombre, el corte de cabello.
Desde la mascarillas hasta el lavado de cabello
La atención en los centros de belleza cambiará de manera radical y para evitar los contagios entre los clientes la prevención empezará desde la puerta del salón, con una bandeja desinfectante de zapatos.
Los clientes deberán acudir al centro de belleza solo con cita previa (canalizada a través de sus respectivos portales o reserva vía telefónica). Si no cuenta con cita previa, acude al salón de belleza y éste ya está con el aforo establecido, no podrá ingresar al salón y deberá esperar fuera de él.
Dentro del salón, se respetará el aislamiento de 2 metros de distancia de otras personas y los clientes deberán contar mascarillas. Desde el lado del trabajador, ellos tendrán ropa especial que deberá ser lavada todos los días. También contarán con mascarillas y usarán guantes, aunque este implemento ya se venía usando pues forma parte de su trabajo cotidiano cuando realizan el tinte de cabello.
El lavado de cabello también tendrá un cambio importante. Actualmente, en los grandes salones se tienen lavacabezas lineales, una pegada a la otra. En tanto, con esta coyuntura se manejarán dos opciones y ello se viene trabajando con los infectólogos.
La primera opción es que el lavado de cabello no se realice al mismo tiempo para todos los clientes y que este proceso se realice con un espacio intercalado. La segunda es contar con acrílicos -como una especie de pared- entre cada lavacabezas.
Finalmente, el pago del servicio será con tarjetas de débito o crédito, evitando el uso de dinero en efectivo, pues también es un transmisor del virus.
Ajuste de costos e inversión
Para evitar los contagios entre clientes ya no habrá revistas y otros posibles artículos de trasmisión del COVID-19. Además, tampoco se ofrecerán aperitivos durante la atención, tales como una tasa de café, gaseosa, té, o lo que antes se solía ofrecer.
Esto se traduce en un ahorro para los salones de belleza y se convierte en una inversión para los equipos de seguridad sanitaria dentro de los locales. Según detalló, dentro de la asociación se cuenta con una comisión de logística que negocia con los proveedores de mascarillas, guantes y de todo lo que se necesite para la atención, a fin que el precio de estos productos no se eleve.
"Por ejemplo, el galón de alcohol en gel cuesta S/ 40 y lo hemos conseguido a S/ 28, porque la propuesta es que todos los que forman parte de la cadena de estética van a comprar el gel solo en la tienda que ofrece ese producto, ya sea en Arequipa, Piura, Cajamarca o en Lima. Entonces ellos (las marcas) venden más y bajamos el precio para que los salones más chiquitos también puedan acceder”, explicó.
El dato
-A fin de evitar despedir a los trabajadores de este rubro, se plantea una distribución de horarios de trabajos. Así, unos trabajarán los lunes, miércoles y viernes; y otros, los martes y jueves.
-No se tiene contemplado el servicio de estética a domicilio puesto que el eje principal de este gremio se basa en asegurar la salubridad del centro de belleza para evitar que el cliente se contagie.