La política monetaria expansiva del Banco Central de Reserva (BCR), reflejada en dos recortes de la tasa de referencia en agosto y noviembre, de 25 puntos básicos cada uno, ha llevado a una reducción del costo de financiamiento para el sector empresarial.
Las primeras beneficiadas han sido las corporaciones, principalmente las que toman financiamiento a plazos más cortos (hasta un año), dijo Mario Guerrero, subgerente de Política Monetaria de Scotiabank.
Así, dicha tasa de interés se redujo entre 60 y 80 puntos básicos desde julio -cuando iniciaron los recortes de tasa del BCR- hasta noviembre, agregó.
En efecto, la tasa preferencial a 90 días en soles para corporaciones descendió de 4.03%, antes de las rebajas de la tasa del BCR, a 3.27% al 27 de noviembre.
El costo de financiamiento de largo plazo para este sector se redujo en menor proporción, en cerca de 20 puntos básicos, comentó Guerrero.
Las siguientes
El ejecutivo detalló que las grandes empresas fueron las siguientes en beneficiarse. La rebaja de tasas para este sector, tanto a corto como a largo plazo, oscila entre 30 y 40 puntos básicos, precisó.
Al cierre de noviembre, la tasa de interés promedio para corporaciones fue 3.94% y para la gran empresa se ubicó en 5.92%, según datos de la Superintendencia de Banca Seguros y AFP (SBS).
En la mediana empresa también se registró un descenso del costo de los créditos, de entre 10 y 20 puntos básicos, que llevó a la tasa a 9.70%, en promedio, el mes pasado, indicó Guerrero.
Añadió que en las pequeñas empresas se observó un comportamiento similar que condujo a que las tasas de largo plazo cayeran en 40 puntos básicos.
Sin embargo, las tasas de corto plazo se incrementaron en 15 puntos básicos por el riesgo crediticio, refirió.
El costo de financiamiento de largo plazo para la micro y pequeña empresa también se redujo, en 10 puntos básicos.
Riesgo crediticio
Uno de los aspectos que limita que el mecanismo de transmisión de la reducción de tasas no sea uniforme en todos los segmentos de empresas es el riesgo crediticio, según Guerrero.
“La percepción de riesgo es menor en una empresa corporativa, que tiene tasas de morosidad muy bajas, cercanas a cero incluso, lo que hace que las reducciones (de tasa de interés) impacten más rápido en este sector, tanto a la baja como al alza”, expresó.
Según el ejecutivo, los segmentos empresariales que usualmente tienen un componente de riesgo crediticio más elevado, tardan más en observar una disminución en las tasas que pagan al financiarse.