Los bonos del operador chileno de parques eólicos ILAP se desplomaron el mes pasado después de que los déficits de transmisión en Chile obligaron a la empresa a comprar energía de terceros para abastecer a los clientes y a pedir dinero prestado a un accionista para pagar deuda.
Los US$ 400 millones en bonos de ILAP con vencimiento en el 2033 registraron un retorno negativo del 14.5% en junio, el peor de todos los bonos chilenos denominados en dólares, según datos de Bloomberg. Eso se compara con una rentabilidad negativa promedio del 2.7% para los bonos en dólares chilenos y del 4.5% para el índice Bloomberg Emerging Markets USD Aggregate Total Return. En lo que va de julio, los bonos han recuperado un 1%.
El precio de los bonos cayó a comienzos de junio luego que la empresa informó que obtuvo un préstamo de US$ 5 millones para ayudarle a pagar un cupón en julio. Días antes, Moody’s Investors Service puso la calificación Ba1 de ILAP en revisión para una posible rebaja. Por otra parte, S&P Global Ratings rebajó la calificación de la empresa a BB- el 24 de junio y advirtió que podrían realizarse nuevas rebajas.
Inversiones Latin America Power Ltda., como se conoce formalmente, tenía alrededor de US$ 6.4 millones en efectivo y equivalentes de efectivo y tiene que pagar US$ 15 millones relacionados con bonos emitidos en el 2021, dijo Moody’s. La compañía declinó hacer comentarios cuando fue contactada por correo electrónico.
El problema no fue obra de ILAP, aunque era predecible. Sus dos parques eólicos son parte de una explosión de proyectos de energía verde en el norte de Chile, que producen más energía de la que la red puede transportar a los principales centros de población más al sur.
Como resultado, ILAP tuvo que comprar energía a otros proveedores para cumplir sus propios contratos con las distribuidoras eléctricas. Además, la escasez de suministro obligó a la empresa a comprar esa energía a proveedores más caros que generan con diésel.
Sin embargo, la situación debería mejorar pronto. Un incremento de las precipitaciones en la zona central de Chile ha aumentado la disponibilidad de energía hidroeléctrica, mientras que dos pequeños proyectos de transmisión deberían entrar en funcionamiento a finales de año, dijo Martín Arancet, analista de crédito de Balanz Capital Valores, que tiene una recomendación de sobreponderar para los bonos.
Una persona con conocimiento de las finanzas de la empresa dijo que el préstamo entre empresas fue una situación puntual y no debería repetirse en el futuro. La persona pidió no ser identificada porque no estaba autorizada a hablar públicamente.
“Todo estaba jugando en contra de ILAP, pero con las nuevas líneas de transmisión y la estabilización de los precios del combustible un poco más bajos, las cosas deberían mejorar”, dijo Arancet. “No esperamos que ILAP tenga problemas para cumplir sus pagos futuros”.