La productora polaca de cobre KGHM tiene planes de mantener sus niveles previstos de producción del 2021 para los próximos años, ante una mayor demanda apoyada por proyectos de inversión más amigables con el medio ambiente, dijo su presidente ejecutivo.
KGHM había considerado cerrar operaciones cuando la pandemia de coronavirus llegó por primera vez a Polonia en marzo pasado, en medio de la incertidumbre por la demanda y los precios, pero optó por continuar las faenas tomando resguardos sanitarios.
Los precios del cobre han repuntado desde entonces, saltando en enero a niveles vistos por última vez en el 2011, y las acciones de KGHM operaban con fuertes alzas el miércoles.
“Nadie fue lo suficientemente hábil en el 2020 en relación a los precios. Nadie podía predecir que el crecimiento sería dinámico. Estos tiempos son muy interesantes cuando se trata de la demanda, sube y baja todo el tiempo”, dijo Marcin Chludzinski.
En términos de precios, “podemos esperar una mejor situación que la del año pasado”, dijo.
“En tres a cinco años, (la demanda) debería ser incluso mayor por los proyectos relacionados con energías limpias, electromovilidad y nuevas tecnologías”, dijo el ejecutivo.
Añadió que el consumo también se vería apuntalado por el compromiso del nuevo Gobierno de Estados Unidos de unirse a los programas para reducir la contaminación por quema de combustibles fósiles.
El cobre, un conductor de electricidad y calor altamente eficiente, es utilizado en sistemas de energía renovables para generar energía solar, hidroeléctrica, termal y eólica.
KGHM, que tiene minas de cobre y fundiciones en Polonia y además yacimientos en Chile, Estados Unidos y Canadá, dijo previamente este año que espera una producción de cobre electrolítico de 573,000 toneladas para este año.
La producción pagadera de cobre en la mina chilena de Sierra Gorda -donde KGHM tiene un 55% de participación- subiría a 99,000 toneladas.