Petroperú, la principal empresa del Estado peruano, enfrenta la que es quizá su peor crisis desde que fue creada en 1969.
La semana pasada, Humberto Campodónico anunció su renuncia al cargo de presidente de la empresa estatal, en medio de un desabastecimiento parcial de combustibles y tras anunciarse la inyección de más fondos a la petrolera (un aporte de capital del Estado de US$ 1,000 millones y una línea de crédito de US$ 500 millones).
¿Qué nos revelan las cifras de Petroperú? Su utilidad neta alcanzó los US$ 114.2 millones al cierre de junio del 2022, según los datos más recientes de sus estados financieros. Dicho monto representa un incremento de 61.1% respecto a igual periodo del año pasado.
Este crecimiento se explica por el aumento de sus ingresos, debido al mayor volumen de ventas y al alza de los precios de sus productos. A eso se sumaron las ganancias por tipo de cambio.
Sin embargo, las mayores utilidades no significaron una mejora en el margen bruto de Petroperú, sino más bien se redujeron desde 15% en junio de 2021 a 9.87% en junio de este año, señaló Jorge Carrillo Acosta, profesor de Pacífico Business School.
Es decir, pese a los resultados en azul, el análisis de los estados financieros de la petrolera enciende las alarmas sobre su solidez y sobre el acceso a la necesaria liquidez para seguir operando su negocio.
El hecho de tener ganancias y ser rentable a nivel contable no garantiza la salud financiera de una empresa, sostuvo Carrillo. “Hay empresas que pueden tener una utilidad enorme, pero no tener caja (liquidez) para cumplir con sus obligaciones”, explicó. La contabilidad registra un ingreso de dinero apenas se entrega un bien o se brinda un servicio, no cuándo se cobra por ellos, precisó.
El nuevo salvavidas lanzado por el Gobierno a Petroperú respondía a una agudización de sus problemas financieros en los últimos meses, que según Campodónico significaban la peor crisis de iliquidez de su historia.
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Grave problema de liquidez
El grave problema de liquidez que presenta la compañía estatal se refleja en el valor negativo de su capital de trabajo, que se amplió desde US$ 804 millones a diciembre del 2021 hasta US$ 1,039.7 millones a junio del 2022, refirió Carrillo.
El capital de trabajo se calcula haciendo la diferencia entre los activos corrientes (la caja y las cuentas por cobrar principalmente) y los pasivos corrientes (las obligaciones y deuda de corto plazo). “Existe, entonces, un hueco por cubrir de unos US$ 1,000 millones. Y eso ha debido de seguir creciendo en los últimos meses, pues las obligaciones han seguido venciendo”, dijo Carrillo.
Por su parte, Alberto Arispe, gerente general de Kallpa SAB, destacó que la posición de la caja de Petroperú se redujo 86.6%, desde US$ 239.6 millones a diciembre del 2021 a US$ 32.2 millones a junio del 2022. “Ese monto es muy poco para cumplir con las obligaciones”, apuntó.
Durante la gestión previa, de Hugo Chávez, los escándalos de presunta corrupción y la negativa de PwC a auditar a la empresa, junto con la rebaja de su calificación de riesgo, llevaron a una restricción de las líneas de crédito bancario que terminó afectando la liquidez de petrolera, sostuvo Carlos Paredes, expresidente de Petroperú.
Sobreendeudamiento
Pero no solo preocupa la liquidez, sino también la solvencia de la petrolera, coincidieron los expertos. Su nivel de endeudamiento o apalancamiento es demasiado elevado, advirtieron.
A junio registró pasivos totales por US$ 7,434 millones, de los cuales US$ 3,035 millones corresponden a deuda de corto plazo y US$ 4,399 millones a la de largo plazo, detalló Arispe. La deuda neta de Petroperú aumentó en los seis primeros meses del año en 23% hasta US$ 5,942.4 millones.
El ratio de deuda capital, que mide el nivel de apalancamiento de una empresa, subió a 0.74 en junio de este año.
Tal ratio en la mayoría de empresas en Perú que cotizan en la bolsa es de alrededor de 1, que significa que están financiando el negocio con 50% de deuda y 50% de capital propio, refirió Carrillo. En Petroperú, en cambio, el 74% ha sido con deuda y apenas el 26% con aportes de los dueños, es decir del Estado, añadió.
“Sin duda, el sobreendeudamiento de Petroperú se explica por la refinería de Talara”, sostuvo Paredes. Recordó que más del 90% del costo del proyecto se ha financiado con deuda.
Los problemas de iliquidez y de elevado endeudamiento hacían necesaria una capitalización por parte del Estado como la que se ha dado, opinó.
Suponiendo que Petroperú genere un Ebitda (utilidad antes de intereses, impuestos y depreciación) anual de US$ 500 millones y luego de descontar el pago de intereses (considerando un interés promedio de 4% y que la deuda neta es la registrada en junio último de S/ 5,900 millones), la amortización total de la refinería de Talara tardaría alrededor de 18 años, estimó Paredes.
Campodónico dijo esperar que recién en 10 años Petroperú empezará a tener una estabilidad financiera mucho más grande.
Arispe sostuvo que de acuerdo con sus fundamentos financieros hoy el valor de la compañía petrolera tiende a cero y que está “quebrada”. Consideró que el Estado va a tener que seguir inyectándole capital, pues la refinería no le va a dar la rentabilidad adecuada para pagar los intereses.
El plan de alivio financiero del Gobierno no ha sido acompañado de candados (como el regreso de Petroperú al ámbito del Fonafe) para evitar que las situaciones de alta iliquidez y de mala gestión se vuelvan a repetir, advirtió Paredes.
“El Estado va a estar rescatando a Petroperú hasta dónde pueda con dinero que es de todos los peruanos”, dijo Carrillo.
Los expertos ven poco probable que inversionistas privados se interesen en esta coyuntura financiera y política por adquirir acciones de la empresa estatal si esta abre su capital como ha sido planteado por el Ejecutivo.
Paredes opinó que la salida de Campodónico de Petroperú es una mala noticia y es vista por el mercado como señal de inestabilidad.
Un número a destacar
ROE: La rentabilidad patrimonial se ubicó en 5.5% en junio del 2022, nivel similar al de diciembre del 2021. Significa que por cada S/ 100 invertidos por los dueños de la empresa ganan S/ 5.5.