La paralización ocasionada por los más de 100 días de cuarentena impactó en el negocio de las mudanzas y, más aún, en las de tipo internacional. "Con las fronteras cerradas, fue imposible mover los embarques que contienen la carga de los clientes", explica Daniela Krumdiek, gerente de Desarrollo de Negocio de Express Transports, compañía que presta sus servicios principalmente a diplomáticos y ejecutivos empresariales expatriados.
Krumdiek comenta que, desde la quincena de marzo hasta a abril la empresa estuvo totalmente paralizada. En mayo, tras obtener permisos, volvió a operar parcialmente, pues ante el riesgo de contagio se activó un tipo de específico de demanda.
"Muchos diplomáticos y ejecutivos con puestos gerenciales se fueron de país, pues el Perú es considerado de riesgo alto en medio de la pandemia", explica.
Del total de servicios atendidos durante la cuarentena por la compañía, que tiene entre sus clientes a varias embajadas, el 60% correspondía a representantes de países extranjeros o sus familiares y el 40% restante a clientes particulares o personas que regresaban a sus país. En este último grupo se encontraban algunos ejecutivos de empresas privadas.
Debido a las restricciones de movilidad, en muchos casos los clientes diplomáticos, que regresaban a sus países en vuelos humanitarios, optaban por empacar rápidamente y, en la medida de lo posible, llevar su carga en los aviones. “Muchas veces no había espacio en las naves y dejaban la carga en nuestros almacenes (Express Transports tiene uno en Chorrillos y otro en Pachacámac) para ser enviada posteriormente por alguna persona encargada”, detalla Krumdiek.
De otro lado, el desplazamiento y retorno de ejecutivos con puestos gerenciales fue más limitado. Esto se debe a que cuentan con más restricciones de movimiento en comparación a los diplomáticos, pero también, en opinión de Krumdiek, a que cuando algún gerente es enviado a Perú, esto responde un ascenso en su carrera y prefieren quedarse, a pesar de la pandemia, para no afectar su crecimiento profesional.
En comparación al 2019, los ingresos de Express Transports han caído drásticamente. Por el lado de las exportaciones (empaque de carga y envío), la contracción ha sido de 40%, mientras que importaciones (recepción de embarques gestionado por agentes internacionales y traslado al domicilio de los clientes), fue de 30%.
Mudanzas locales
Si bien la especialidad de Express Transports son las mudanzas internacionales, el cierre de fronteras llevó a la empresa trabajar más mudanzas locales. Esta modalidad en el periodo de cuarentena creció en 20% en comparación al 2019.
Daniela Kriumdiek detalla que la mayoría de los casos que han atendido a nivel interno son mudanzas de oficinas. Sin embargo, destaca que muchas empresas grandes han optado por mantener sus oficinas vacías y no cambiar de espacios debido que los contratos de alquiler cuentan con cláusulas que los castigan con fuertes penalidades si deciden terminarlo.
“Conocí casos de empresas que terminaban pagando más dinero si concluían su contrato ahora, e incurrían en menos gasto si lo mantenían y pagaban el alquiler mensualmente, a pesar de que faltaban varios años para el vencimiento”, explica. Es por ello que gran parte de las mudanzas locales atendidas por la empresa correspondieron a compañías medianas o pequeñas, que contaban con contratos de alquiler más flexibles o de vencimiento cercano.