Meta, la empresa propietaria de Facebook e Instagram, anunció este miércoles que reabrirá por completo sus oficinas en Estados Unidos el próximo 31 de enero, pero permitirá a sus empleados seguir trabajando desde casa si lo quieren hasta junio.
La firma que dirige Mark Zuckerberg sigue así pasos similares a los de Google, que la semana pasada retrasó indefinidamente el retorno de sus trabajadores a la oficina por la irrupción de la variante ómicron del COVID-19.
“Reconocemos que algunos de nuestros empleados no están listos para regresar, así que seguimos ofreciéndoles varias opciones para que elijan la que mejor les vaya y puedan tomar decisiones informadas acerca de desde dónde trabajar”, indicó en un comunicado la vicepresidenta de Meta para recursos humanos, Janelle Gale.
Como ya apuntó Zuckerberg poco después de declararse la pandemia el año pasado, la voluntad de los directivos de Meta es que el trabajo remoto se consolide en la empresa y que la mitad de sus empleados esté trabajando de forma permanente desde casa en 2030.
Así, aquellos trabajadores que lo quieran, ya pueden pedir el cambio a 100% remoto de forma permanente y, si su petición es aprobada, no deberán preocuparse por el regreso a la oficina.
Sin embargo, aquellos empleados que no lo soliciten o a quienes aun solicitándolo no les sea concedido, sí deberán volver a la oficina, y es para estos casos para los que se han creado las excepciones que les permiten posponer su retorno entre 3 y 5 meses a partir de finales de enero (es decir, hasta junio como muy tarde).
Meta tiene en la actualidad unos 60,000 empleados repartidos por toda la geografía estadounidense y por otras partes del mundo, aunque la mayor concentración de trabajadores está en la sede central de la empresa en Menlo Park (California, Estados Unidos).