El fabricante italiano de automóviles deportivos Lamborghini presentó este martes “su hoja de ruta hacia la electrificación”, un ambicioso plan para lanzar el primer superdeportivo completamente eléctrico a partir del 2025.
Para lograr ello realizará una inversión de más de 1,500 millones de euros (US$ 1,800 millones) en cuatro años.
En el 2023 presentará su primer modelo de producción híbrido y “a partir de finales del 2024 toda la gama será electrificada”, anunció la prestigiosa marca en un comunicado.
El primer Lamborghini completamente eléctrico estará listo para el 2025, precisó.
“Con el plan de electrificación, Lamborghini cambia rumbo, un paso necesario debido a que el contexto ha evolucionado radicalmente y queremos contribuir con proyectos concretos a la reducción del impacto sobre el medio ambiente”, comentó el presidente y director general, Stephan Winkelmann.
El “plan de transformación” de la marca será financiado con “la mayor inversión de la historia de Lamborghini” y “nos permitirá alcanzar un futuro más sostenible”, añadió.
La primera fase (2021-2022) estará marcada por el desarrollo de motores de combustión interna “destinados a rendir homenaje a la historia de la marca”.
El segundo paso, entre el 2023 y 2024, será dedicado a la transición híbrida de Lamborghini y se estima que para finales del 2024 toda la gama estará electrificada.
El fabricante había presentado en el 2019 el superdeportivo Sian, el primer Lamborghini con tecnología híbrida, con una producción de serie limitada.
La tercera fase será dedicada a los primeros Lamborghini “totalmente eléctrico”, con el objetivo de “introducir un cuarto modelo en la gama en el futuro”, adelantó la marca.
El fabricante de automóviles de lujo también se comprometió a reducir sus emisiones de CO2 en un 50% desde principios del 2025 en su planta de producción en Sant’Agata Bolognese, en el norte de Italia, y garantizar “la sostenibilidad de las cadenas de suministro”.
Lamborghini resistió a la crisis económica provocada por la pandemia de coronavirus y alcanzó en 2020 su “segundo mejor año de la historia” en términos de ventas, junto con una rentabilidad “récord”.
El fabricante italiano, que pertenece al gigante alemán Volkswagen, vendió 7,430 vehículos en todo el mundo, el segundo mejor resultado de la marca tras el récord obtenido en el 2019 con 8,205 bólidos.
Sin embargo, la facturación cayó un 11% debido al cierre el año pasado de la producción durante 70 días por las medidas restrictivas tomadas en Italia para frenar la pandemia de coronavirus.