El Gobierno decretó que, a partir del 10 de diciembre, toda persona que realice una actividad laboral presencial deberá acreditar su esquema completo de vacunación contra el COVID-19, obligando a las empresas a enviar a las personas que no cuenten con dicha condición al trabajo remoto o a una suspensión sin goce de haber (Decreto Supremo 179-2021-PCM).