El multimillonario Elon Musk consideró que aún quedaban “algunos problemas no resueltos” en su proyecto de compra de Twitter por US$ 44,000 millones, especialmente el asunto “muy importante” de la cantidad de falsos usuarios de la red social.
“Quedan problemas no resueltos”, declaró Musk en el Foro económico de Qatar, donde apareció en videoconferencia, pero no quiso extenderse sobre el “sensible” tema de la compra de Twitter.
Según él, la red social considera el número de falsas cuentas y spams en menos de 5% de los usuarios activos diarios, lo que el empresario pone en duda.
“Esperamos siempre una solución sobre este asunto tan importante”, dijo el jefe de Tesla y SpaceX, cuando Twitter finalmente aceptó a inicios de junio dar las informaciones necesarias sobre ese tema.
La deuda de Twitter y la votación favorable de los accionistas hacen también parte de los puntos por resolver, agregó.
Musk desea que 80% de la población norteamericana y la mitad del mundo llegue a la red social y reconoce que es necesario que sea “un espacio donde la gente no se sienta incómoda u hostigada”.
Ahí entra en juego su concepción de la libertad de expresión, “diferente del acceso libre” a los contenidos.
“Twitter debería dejar a la gente decir lo que quiera de acuerdo con los límites de la ley y limitar lo que la gente vea según las preferencias de los usuarios”, abogó.
Si su proyecto de compra tiene éxito, Musk desea ser “el piloto del producto” Twitter, como hace en Tesla y SpaceX, sin que sea necesario tener el título de CEO.