La consultora Accenture anunció que cierra su negocio en Rusia, sumándose al éxodo de empresas que han salido del país desde que el presidente Vladímir Putin ordenó la invasión de Ucrania y los países occidentales impusieron sanciones contra Moscú.

En una breve nota, desgranó que empleaba a 2,300 personas en Rusia y les agradeció su “dedicación y servicio” en los últimos años, limitándose a comunicar que les dará “apoyo”.

La consultora no tiene operaciones en Ucrania, pero dijo que está asistiendo a sus empleados de nacionalidad ucraniana y a sus allegados, ofreciendo servicios sanitarios en remoto a quienes permanecen allí y “ayudando a reasentarse a los miembros de sus familias que abandonen Ucrania”.

Accenture está con el pueblo de Ucrania y los Gobiernos, empresas y personas de todo el mundo pidiendo el fin inmediato al ataque ilegal y horrible contra el pueblo ucraniano y su libertad”, declaró la consultora, que hará una donación de US$ 5 millones a ONG implicadas en la ayuda al país del este de Europa.

Según el diario Financial Times, este jueves otra conocida consultora estadounidense, McKinsey, que tiene unos 400 empleados en Rusia, dijo que cesaba inmediatamente sus operaciones con las entidades estatales y que suspendería los negocios con sus clientes en ese país una vez terminen sus proyectos.

Esos dos nombres se suman a una avalancha de firmas de todos los sectores que han abandonado sus negocios en Rusia en represalia a la invasión del país vecino iniciada hace una semana por Putin, entre ellos Michelin, , Volkswagen y , que lo han anunciado en las últimas horas.