Los primeros modelos i4 eléctricos del fabricante alemán de automóviles alemán BMW listos para la venta salieron el viernes de las líneas de producción de su planta principal en Múnich, mientras la compañía expande su oferta verde en medio de la presión de la industria para reducir las emisiones.
El automóvil se fabricó en la misma línea de ensamblaje que los modelos de motor de combustión interna y los híbridos como el BMW Serie 3 Sedan y Touring, dijo la compañía, un cambio que costó 200 millones de euros (US$ 233 millones) en inversión en las estructuras de producción.
Una línea de ensamblaje mixta similar ya está en marcha en la planta de Dingolfing, que produce el BMW iX junto con modelos híbridos y de motor de combustión interna.
Para el 2023, más de la mitad de todos los vehículos de las instalaciones de Múnich tendrán un propulsor electrificado, ya sea vehículos totalmente eléctricos o híbridos, dijo el miembro de la junta de producción de BMW Milan Nedeljkovic en un comunicado.
BMW se ha fijado el objetivo de que al menos el 50% de los automóviles vendidos a nivel mundial sean eléctricos para el 2030, y el director ejecutivo Oliver Zipse dijo la semana pasada que la compañía estaría lista con una oferta totalmente eléctrica si algún mercado prohibiera los motores de combustión interna entonces.
El fabricante también se comprometió a reducir a cero las emisiones de la logística de transporte en la planta de Múnich, la más grande de la compañía, en los próximos años, sin dar una fecha específica.
Esto se logrará haciendo un mayor uso del transporte ferroviario y camiones eléctricos para transportar vehículos dentro y alrededor de la planta, señala el comunicado.