Albemarle Corp., el mayor productor de litio del mundo, se está expandiendo lo más rápidamente posible y está evaluando nuevas oportunidades en momentos en que los compradores del metal para baterías enfrentan dificultades para mantener el ritmo de la creciente demanda de vehículos eléctricos.
La compañía planea empezar a vender desde una nueva planta en Chile a principios de 2022 y desde una expansión en Australia Occidental a mediados de año, mientras reinicia otra mina que se encuentra paralizada. Al mismo tiempo, está evaluando una licitación de nuevos contratos en Chile y buscando posibles adquisiciones en Australia, Norteamérica y Europa, según dijeron altos ejecutivos de la empresa en una entrevista el jueves.
El fuerte ajuste del mercado del litio, uno de los componentes clave de las baterías recargables, ha hecho subir más del doble en 2021 un índice de referencia y ha impulsaod los precios en China a niveles récord. Con poco o ningún inventario en el sistema en este momento y una demanda que se triplicará para 2025, los compradores están acaparando todo el litio que pueden.
“Estamos yendo lo más rápido que podemos” en términos de ejecución de proyectos, dijo el director ejecutivo, Kent Masters, desde la sede de la compañía en Charlotte, Carolina del Norte.
La compañía podría poner en operación un segundo y tercer tren en su empresa de Wodgina, en Australia, una vez que disponga de la capacidad de conversión. También tiene la intención de poner en marcha recursos en Estados Unidos “un poco más adelante”, agregó.
En Chile, Albemarle compró las bases de licitación para una nueva ronda de contratos que ofrece el Gobierno saliente. La empresa está evaluando si licitará en zonas cercanas a sus operaciones existentes, incluso preguntando cómo considerará los contratos el próximo Gobierno, dijo Eric Norris, presidente de litio, junto a Masters.
“Es un entorno político muy complejo”, dijo Norris. “Estamos haciendo nuestra debida diligencia en ese proceso en este momento”.
Albemarle no descarta unirse a la ola de acuerdos en la industria, aunque en este momento su atención está centrada en los activos de conversión más que en los recursos mineros.
Aun así, la compañía analizará proyectos de roca dura en Australia Occidental y está “siguiendo de cerca” algunos recursos que se están desarrollando en Norteamérica y Europa, dijo Norris.