A raíz de la pandemia y la consecuente paralización de la demanda de salsas en el canal de hoteles y restaurantes (horeca), Adelmi Global Food reorientó su negocio al consumidor final no solo con marcas blancas, sino ahora también con marca propia.
El gerente general de la empresa, Arturo Delgado, señaló que la marca -que lleva el mismo nombre de la empresa- les permite competir directamente en la categoría de salsas en retailers y tiendas, a donde ha migrado el consumo desde el año pasado.
“Antes se vendía más a granel porque había restaurantes. Mucha industria de salsas ahora ha cambiado sus formatos a productos de menor presentación para el cliente final. El volumen (en la categoría) se ha reducido un poco, los delivery de comida no llegan a compensar”, comentó.
Estrategia
En esta nueva etapa, Adelmi enfocará su marca propia a las salsas orientales y especiales como la Acevichada, apartándose así de la batalla del segmento de commodities (mayonesa, mostaza, kétchup y ají).
“Ahora estamos trabajando en salsas veganas, sin descuidar a las marcas blancas (Bells, Vega, Molitalia, Tambo y otros) que nos dan mayor facturación, aunque las salsas especiales tienen más rentabilidad. Aun no es el momento de ir a pelear en los commodities”, sostuvo.
En el canal retail, la firma quintuplicó sus ventas el 2020 y este año esperan crecer 50%. Dicho segmento compensó la caída del canal horeca, que aportaba el 80% y ahora se redujo al 20% de los ingresos. Asimismo, este año ingresarán al canal tradicional.
Fabricación
Para la producción de salsas, Adelmi invirtió hace unos años en una fábrica de 1,600 metros cuadrados en Chorrillos.
A la fecha, vienen operando al 30% de la capacidad total.
De operar a plenitud, podrían triplicar los volúmenes en el espacio que aun dispone.
En estas instalaciones, puede producir 120 toneladas mensuales de salsas frías (mayonesa y otros) y 240 toneladas mensuales de salsas calientes (jaleas, mieles y otros pasteurizados).
EN CORTO
Exportación. A partir del desarrollo de la salsa acevichada, Adelmi espera abrir puertas en el exterior. A la fecha, ya ha recibido el interés de clientes en Centroamérica, Chile y Colombia. “La salsa peruana no es la mayonesa, sino la acevichada, es conocida en América y tiene características peculiares para los pescados inicialmente, pero también con carnes”, sostuvo Arturo Delgado.