Richard Manriquermanrique@diariogestion.com.pe
El ministro Jorge Merino ha dicho que el gas sobra, como para tres Camiseas más . ¿Es así?Opinar sobre las reservas es difícil. Al Perú ya le ocurrió esto con la Amazonía: un geólogo alemán dijo que la selva estaba flotando en petróleo. Sin embargo, encontramos pequeñas cantidades y no económicamente explotables. Hay que ser conservador y alentar las inversiones en exploración de gas.
Si no se puede especular con el gas, ¿por qué se inicia el Gasoducto del Sur con solo 3 TCF disponibles, la mitad de lo que necesita el proyecto?Pero con 3 TCF (trillones de pies cúbicos) se paga el gasoducto. Sin tener una gran rentabilidad, el valor aparece por la petroquímica. Las inversiones van arrancar para los 3 TCF, que permiten construir el gasoducto. Y a futuro, con las altas expectativas del lote 58, se podría llegar hasta los 6 TCF.
¿Basta con los 3 TCF para atraer la inversión?Existen tres escalas para el proyecto en base al gas disponible. La escala de 3 TCF es casi un mínimo que permite una recuperación económica, siendo la estrella el proyecto del etano, etileno y polietileno, para lo cual ya existe lo que se necesita. La segunda etapa es la de 6 TCF: esto puede o no realizarse, pero encontrar 3 TCF adicionales está dentro de lo altamente probable. La tercera es llegar a 11 TCF, pero eso es más difícil.
El problema del 'loop' de Transportadora de Gas del Perú (TGP) le hace sombra al Gasoducto del Sur. Hay gas pero no hay cómo transportarlo.El Gasoducto del Sur es un anhelo de la región sur: no creo que haya oposición. Entiendo, además, que ya se tiene los permisos para la ruta. Eso no sería un obstáculo. En el caso del gasoducto del centro (de TGP), sí hay problemas. Aunque esto no se dice, uno percibe en el ambiente que parte de la oposición al gasoducto de TGP es la idea de que si se llevan el gas para el centro, ya no habrá para el sur.
¿Hasta cuándo esperaremos el 'loop' de TGP?Si no se logra arrancar ahora mismo, en abril, esta obra ya no se puede ejecutar este año. Hay una ventana de seis meses en la cual se puede trabajar en la zona. Si no se ejecuta este año hay que comenzar el próximo año, porque no se puede dejar sin terminar. Y ahí ya es tarde, porque la siguiente etapa, que es la de la planta de compresión, resuelve el problema sin necesidad del 'loop'. Un 'loop' es una ampliación, unos tubos que se duplican en algunos trozos del ducto. Para ese tiempo, difícilmente lo querrán hacer.
¿Qué consecuencias traerá la falta del 'loop'?Esto nos lleva a que el suministro de gas que debió estar este año, ni siquiera estará en el 2013, sino en el 2014. Y el próximo año deberían estar entrando en servicio centrales térmicas como la de Fénix de 500 megawatts, la planta de Termochilca y las capacidades remanentes. Creo que le falta un 15% a los 900 megawatts de Kallpa y a los 900 megawatts de Enersur, además de una turbina de Duke. La cantidad de energía que quedaría sin suministro de gas sería bastante grande.
Se hablaba de una crisis energética para el 2017 , ¿ahora será el próximo año?La cosa podría ser aguda, no en extremo. El próximo año la reserva del sistema eléctrico sería casi de 0%, es decir, no tendríamos capacidad para soportar ninguna contingencia. Entonces, cualquier contingencia podría ocasionar un racionamiento transitorio del sistema eléctrico.
¿Cuál sería la solución?El gobierno ha resuelto uno de los dos problemas de Camisea: que las reservas del lote 88 se queden para el mercado interno. El segundo tema que le falta resolver es que, en caso de escasez de transporte, la prioridad la tenga el mercado interno. Eso yo lo conversé con el Consorcio Camisea y estaba dispuestos a aceptarlo. Entendían que es un derecho natural, pero eso debería quedar escrito como un acuerdo. Esto facilitaría el financiamiento de las centrales térmicas, porque corren el riesgo de que los bancos le corten los créditos porque no está asegurado el transporte del gas, y entonces la situación sería más difícil.
¿Quiere decir que se recortaría la exportación del gas?Sí. La razón es sencilla: el ducto de la selva que se pagó con GRP (Garantía por Red Principal, dinero asumido por los peruanos en las tarifas eléctricas). Esos contratos decían que, en los primeros diez años –o sea, hasta el 2014–, solo podía pasar gas del lote 88 que era para el mercado interno. Esos contratos se modificaron en el gobierno anterior y se le dio un espacio de 600 millones de pies cúbicos o más a la exportación, superior a la capacidad del ducto de la selva, lo que trajo prisa para lograr la ampliación y generó presión a los proyectos del mercado interno.
¿La crisis energética estaría ligada a la exportación?Pero para evitar la sombra de una crisis en el 2013 y 2014, lo que debería quedar claro por el lado del Gobierno es decir que no habrá recorte al mercado interno, por lo menos en lo que se refiere al transporte, ya que la capacidad remanente del ducto ha sio entregada a la exportación cuando le corresponde al mercado interno.
¿No suena rimbombante anunciar "la recuperación del lote 88" y los proyectos del sur, mientras no podemos transportar el gas?Claro. Es correcto lo que se dice: se tiene ahora un gas del lote 88 que no se puede utilizar porque no hay transporte. Pero eso es de corto plazo;. El tema debería enmendarse completamente.
¿Y el lote 88 se "recuperó", se "liberó" o no se hizo nada?Se recupera algo que se ha perdido y los términos corresponden a la realidad. Se tuvo el lote 88 en los contratos originales de Camisea. Después se cedió a la exportación modificando los contratos. Hoy en día se ha devuelto, pero hay que ver los documentos puestos en los contratos, porque sino no vale. Los 2.5 TCF de gas del lote 88 nos extienden el suministro alrededor de 10 años, y usados eficientemente hasta 15 años. Es un gran alivio.