El presidente del Banco de la Reserva Federal (Fed) de Richmond, Thomas Barkin, dijo que ve tres fases para la economía estadounidense este año y que es bastante optimista gracias a los avances que parecen estar logrando las autoridades sanitarias para controlar la pandemia del COVID-19.
El primer tercio del año será el más difícil, con una necesidad continua de medidas de apoyo para los trabajadores desempleados y las pequeñas empresas mientras los esfuerzos de vacunación ganan terreno, sostuvo en un evento virtual.
En la segunda fase, hacia mediados de año, las poblaciones vacunadas volverán a realizar actividades a las que han tenido que renunciar durante gran parte del 2020, por lo que ve una buena “demanda reprimida” para actividades como viajes y ocio.
El último tercio del año debería ser testigo de la vuelta a un entorno empresarial más normal, dijo Barkin, que agregó que el elemento más importante para lograr sus perspectivas es el éxito en el frente de la salud pública.
Inflación
Por su parte, el presidente de la Fed de Boston, Eric Rosengren, afirmó que es poco probable que la inflación alcance el objetivo de 2% de la Fed de forma sostenida al menos hasta el 2022.
En los próximos meses “vamos a ver un cierto repunte de la inflación”, sostuvo en un simposio en línea de la Universidad de Nuevo Hampshire.
“Los precios de los alimentos y la energía pueden subir, ya que algunas áreas de la economía enfrentan cierta escasez. Pero lo que realmente queremos para la inflación es que la tasa de inflación general se sitúe en un nivel sostenido de 2%. No creo que lo veamos este año. Me sorprendería que lo viéramos antes de finales del próximo año”, agregó.