En los siguientes tres meses será más difícil obtener créditos bancarios, según una encuesta del Banco Central de Reserva (BCR).
El sondeo realizado por el instituto emisor a bancos muestra que las condiciones de la oferta crediticia se endurecerán para todos, desde grandes empresas a mypes, hasta las diferentes modalidades de financiamiento personal.
“En cuanto a las perspectivas para los próximos 3 meses, se presenta un panorama restrictivo en las condiciones de oferta para las medianas, pequeñas y microempresas. En el caso de crédito a personas, se deterioraron las condiciones de oferta, de tal manera que todos los segmentos pasaron al tramo pesimista”, señaló el BCR.
Más acentuadas
Si bien las condiciones de oferta para los diversos tipos de préstamos estarán en zona restrictiva de agosto a setiembre, se tornarán aún más duras para las personas.
Así, las condiciones a las que se otorgan los créditos de consumo y tarjetas -contratados por la mayoría de deudores del sistema financiero-, pasan de zona de “relajamiento” a “endurecimiento”, siendo más acentuadas para quienes usan plásticos.
La banca también será más rigurosa al evaluar a quienes soliciten una hipoteca para adquirir vivienda.
La confianza de los consumidores está en nivel mínimo por el deterioro del empleo e ingresos reales y una menor inversión privada que reduce la generación de puestos de trabajo, dijo a Gestión el jefe de Análisis de Intéligo SAB, Luis Eduardo Falen.
“En esta tormenta perfecta que se refleja en una menor actividad económica, los bancos tienen cautela en la colocación de créditos”, añadió.
Más riesgoso
En tanto, Yang Chang, docente de la Universidad de Piura, refirió que, en particular, las tarjetas de crédito son el producto financiero más riesgoso, por lo que el acceso a estas se complicará más porque con un entorno económico debilitado e incertidumbre política crece la probabilidad de incumplimiento de pago de los usuarios.
En créditos de consumo en general, las restricciones de los bancos se traducirán en financiación a menor plazo, exigencia de garantías líquidas y preferentes, y en racionamiento de préstamos a sectores más riesgosos, sostuvo.
Disclaimer
“Se espera un disclaimer, una discriminación o descreme de clientes, pues los bancos se inclinarían a prestar a los de menos riesgo y reducirán la oferta a los demás”, expresó. Chang dijo estar completamente de acuerdo con que la banca se apreste a frenar los créditos, ya que actuará con cautela en un contexto adverso en el que priman la inflación global e interna, alzas de tasas de interés y desaceleración de exportaciones peruanas por decaimiento de sus socios comerciales, lo que provocará menores flujos de capitales al país.
Se agrega a ello, continuó, malas políticas del Gobierno y leyes del Congreso que debilitan la demanda interna, con menor gasto e inversión privada y pública.
Ciclo de alzas
“En este contexto de incertidumbre y menor actividad económica prevalece la cautela de familias, empresas y bancos. Todos buscan guardar pan para mayo”, comentó.
Falen, a su vez, enfatizó que los bancos centrales, incluyendo el BCR, están en pleno ciclo de alzas agresivas de tasas de interés para enfrentar las presiones inflacionarias de demanda y, sobre todo, las expectativas de inflación, políticas que, per se, restringen la oferta crediticia.
Empresas
Las empresas también afrontarán condiciones más restrictivas para acceder a financiamiento, incluso corporaciones y grandes compañías, según la encuesta del BCR efectuada a representantes de las áreas de riesgos, comercial y finanzas de los bancos.
En un escenario de incertidumbre política y económica las empresas frenan sus decisiones de inversión, y ante la menor actividad la banca actúa con mayor precaución, afirmó Falen.
Expectativas de demanda se moderan
Los bancos también tienen menores expectativas de demanda de créditos para los siguientes tres meses. “Las entidades encuestadas esperan una moderación en la demanda en los tres sectores empresariales. Por el lado de los créditos a personas, las expectativas de los bancos son una contracción de la demanda de préstamos de consumo, tarjetas de crédito e hipotecarios”, señala el BCR.
Las expectativas del sistema bancario son más pesimistas en torno a la demanda de financiamiento por parte de mypes y de hipotecas para adquisición de vivienda.
Luis Eduardo Falen, de Intéligo SAB, indica que también las grandes empresas están cautas en demandar préstamos por el rápido incremento de las tasas de interés y por la elevada incertidumbre política y económica.