El sondeo empresarial de setiembre, realizado (entre el 8 y 14 de este mes) a los ejecutivos de las más de 300 empresas e instituciones asociadas al Servicio de Asesoría Empresarial (SAE) de Apoyo Consultoría, evidencia la persistente desconfianza del sector corporativo en el gobierno de Pedro Castillo.
A mes y medio del inicio de esta nueva gestión, los ejecutivos consultados advierten que el Gobierno no muestra señales concretas del rumbo de su agenda.
“Por el contrario, la insistencia en el recojo de firmas para la convocatoria de una Asamblea Constituyente por parte de Perú Libre, la sugerencia de reformas sectoriales con implicancias inciertas, el nombramiento de funcionarios priorizando la afinidad política sobre la idoneidad, o la incertidumbre respecto a la elección del Directorio del BCRP representan alertas, que mantienen una elevada desconfianza del empresariado”, señala la consultora.
Expectativas
En este contexto, las perspectivas empresariales para invertir y contratar personal a seis meses en setiembre se mantienen en niveles históricamente críticos (-38 y -11, respectivamente, ver gráficos). Estos niveles solo han sido más graves durante los peores meses del confinamiento obligatorio (2T2020) debido al covid-19.
“Esta deteriorada confianza empresarial se traduce en expectativas de crecimiento de ingresos y utilidades bastante conservadoras durante 2022. En promedio, los ejecutivos encuestados esperan que los ingresos de sus negocios crezcan apenas 5% durante 2022, luego de un rebote de 13% durante 2021. Por otro lado, si bien el 57% de los ejecutivos espera que las utilidades de sus empresas aumenten en 2021, solo el 26% espera mayores utilidades en 2022″, detalla.
Más competencia
En ese contexto de débil crecimiento de los ingresos de las empresas, el 72% de los ejecutivos encuestados espera una alta o muy alta competencia basada en precios durante 2022, probablemente explicada por un menor crecimiento de la demanda y un mayor estrés financiero de empresas y hogares.
Con mercados locales menos dinámicos, la mayoría de ejecutivos prevé que la competencia por atracción y retención del talento y la competencia por adaptarse a las preferencias de los clientes será más moderada. “En tanto, la entrada y salida de competidores en los mercados en que participan se percibe que no será tan intensa, lo que reflejaría una creciente pérdida de interés de potenciales inversionistas en el mercado peruano”, detalla.
Qué harán
Finalmente, consultados respecto de las principales estrategias que implementarán en lo que queda del 2021 y durante el próximo año, la mayoría de los ejecutivos señalaron que buscarán una mayor eficiencia operativa. En este sentido, 61% de ejecutivos mencionó que su empresa implementará programas de reducción de costos -que no impliquen recortes de personal- mientras que 53% afirmó que priorizará programas de optimización de procesos.
En tercer y cuarto lugar, resalta el esfuerzo por continuar apostando por el desarrollo de plataformas digitales (49%) y el lanzamiento de nuevos productos (34%), que respondería a la necesidad de responder a los cambios que exigen los clientes, señala.