¿Qué nos dicen los modelos de las RRII sobre la crisis energética europea y las tensiones militares entre Rusia y la OTAN?
Escribe Gustavo Sebastián Sánchez García, alumno de Economía de la Universidad del Pacífico.
En medio de una preocupante crisis energética europea, un incremento generalizado de precios a nivel mundial y, a su vez, tensiones entre dos potencias militares como son la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y Rusia, múltiples mandatarios, al igual que diversas organizaciones internacionales, encienden las alarmas. Pese a ello, el desarrollo teórico relevante a los principales modelos dentro del campo de las Relaciones Internacionales nos podría sugerir que, al menos en el mediano plazo, la crisis energética europea y sus principales efectos colaterales podrían solucionarse. ¿Desde qué perspectivas es posible sostener dicho argumento? ¿Qué son los modelos o corrientes del pensamiento de las Relaciones Internacionales y qué nos dicen sobre el futuro de la crisis energética europea y las tensiones militares entre Rusia y la OTAN?
Liberalismo y Realismo: Visiones de la política mundial
En efecto, los modelos o corrientes del pensamiento dentro del campo de las Relaciones Internacionales (RRII) pueden ser tomados como “lentes” mediante los cuales uno puede interpretar y analizar diversos acontecimientos surgidos en el campo de la política mundial. Por ejemplo, uno puede analizar e interpretar las relaciones políticas entre dos países a partir de un modelo asumiendo que los mismos rigen su política exterior a partir de este. En este sentido, es fundamental definir y presentar a dos de los principales modelos dentro del campo de las Relaciones Internacionales: el liberalismo y el realismo.
La primera surge a partir de las bases filosóficas desarrolladas por Jhon Locke (Locke, 1664). El liberalismo concibe a la política mundial como relaciones de integración, cooperación y progreso mutuo. Según la visión liberal de las RRII, los organismos internacionales, Estados y naciones buscan constantemente el cumplimiento de sus objetivos individuales mediante la interdependencia económica, la cooperación entre los mismos y el desarrollo mutuo (Deudney & Ikenberry, 2018).
Respecto a la segunda escuela, dicha visión surge a partir de las bases filosóficas desarrolladas por Thomas Hobbes (Hobbes, 1651). El realismo concibe a la política mundial como relaciones de poder (Cox, 2016). Según la visión realista de las RRII, los organismos internacionales, Estados y naciones buscan constantemente la consecución de sus objetivos individuales mediante la disputa del poder, priorizando sus respectivos intereses individuales antes que los colectivos.
Desde la visión realista, es posible considerar al conflicto armado dentro del abanico de acciones a tomar en primera instancia por un Estado, nación u organismo internacional deseoso de maximizar su poder. Por el contrario, el liberalismo considera al conflicto armado como un recurso de última instancia.
La problemática, su mayor obstáculo y los escenarios más pesimistas
Pese a que la descripción de la crisis energética europea no es el objetivo principal del presente artículo, la misma puede ser resumida como los efectos colaterales de una demanda insatisfecha de gas natural en la mayoría de los países miembros de la Unión Europea (U.E.). Uno de los principales países afectados por la crisis e interesados en encontrar una solución es Alemania. En este escenario, todo parece indicar que la solución reside en la aprobación de la licencia de funcionamiento del gasoducto Nord Stream 2 por parte de la U.E. Ello significa la apertura de un nuevo canal de exportación directa de gas natural de Rusia hacia la Unión Europea que aliviaría los requerimientos de la demanda actual y que, a su vez, representa una inversión de 11 mil millones de dólares por parte de la empresa rusa Gazprom (BBC, 2021).
Aunque parezca sencillo visualizar la solución al problema, Nord Stream 2 lleva meses esperando el visto bueno consistente en el largo plazo. El principal obstáculo para la aprobación del funcionamiento del gasoducto en cuestión viene de parte de Estados Unidos (EEUU): se considera que la aprobación de este incrementa exponencialmente la dependencia energética tanto de la U.E. como de Ucrania con Rusia (El País, 2021). Considerando las tensas relaciones, tanto diplomáticas como militares, entre Rusia y Ucrania desde la anexión de Crimea en el año 2014, es lógico pensar que aquello sería problemático para el ex país soviético.
La mayor preocupación a nivel mundial reside en la ocurrencia de un evento que agrave la crisis energética europea. Considerando la situación actual, el empeoramiento de la crisis podría ocurrir, principalmente, en dos escenarios: en una demora indefinida de la aprobación del gasoducto Nord Stream 2 o en el inicio de un conflicto armado entre la OTAN, conformada principalmente por países de la U.E., y Rusia. En este sentido, es posible argumentar que tales escenarios, tanto desde la perspectiva liberal como desde la realista, son poco probables de acontecer.
Análisis desde la perspectiva liberal:
A partir de la óptica liberal, la aprobación de Nord Stream 2 es cuestión de poco tiempo. Ello debido a que comercialmente es conveniente, al menos, para los directamente involucrados en su aprobación y supone un avance significativo en la interdependencia económica entre la U.E. y Rusia. Evidentemente, que Rusia sea el ofertante responsable de aproximadamente un tercio del gas importado por la U.E. es una muestra de los significativos intereses en común existentes entre los mismos (El País, 2021). A pesar de los obstáculos impuestos por EEUU y su temor de situar a Ucrania en una posición económicamente vulnerable, debemos considerar que los directamente afectados por la crisis energética son los miembros de la U.E. Países en los cuales recae, a su vez, la decisión de la aprobación o no del gasoducto en cuestión.
Si, además, a ello le sumamos el hecho de que la política exterior de la administración de Biden no se ha mostrado sumamente reacia al proyecto en la misma medida en la que, en su momento, la administración Trump lo hizo, podemos intuir que la predicción de la perspectiva liberalista es más factible de lo que parece (DW, 2021). A partir de la visión liberal, no existen razones significativas por las cuales, dada la situación actual de la crisis, se siga posponiendo la aprobación del gasoducto en cuestión.
Asimismo, el peligro del inicio de un conflicto armado entre la OTAN y Rusia no supone, al menos en la actualidad, una preocupación mayor a nivel mundial desde la perspectiva liberal. Ello debido a que, como se mencionó, según el presente modelo o corriente del pensamiento, el conflicto armado se considera como un recurso de última instancia. Además, recientes reuniones entre mandatarios tales como la sostenida por Vladimir Putin y Joe Biden el pasado 7 de diciembre nos muestra que la vía diplomática entre Rusia y la OTAN aún no muestra señales de un desgaste significativo.
Análisis desde la perspectiva realista:
La perspectiva realista suele preocuparse por la ruptura de una tensión política o militar en un conflicto armado. Además, una preocupación que surge a partir de una visión realista a la crisis energética es que Rusia utilice en el futuro la dependencia energética de la U.E. y Ucrania como una herramienta económica de coacción en contra de ambos (El País, 2021). Pese a ello, las preocupaciones realistas podrían ser neutralizadas por dos factores: el balance y equilibrio del poderío militar entre Rusia y la OTAN, y las nuevas condiciones impuestas por EEUU a Rusia para la aprobación del Nord Stream 2.
Por un lado, la literatura académica relevante sugiere que el equilibrio y balance del poder militar entre dos Estados, naciones u organismos internacionales reducen las probabilidades de ocurrencia de una guerra o conflicto armado. La explicación es simple e intuitiva: al existir un equilibrio de poderío militar se llega a un estado en el cual ambos pueden perder por igual ante el escenario de un conflicto armado. En este escenario, la movilización de tropas, aviones caza, sistemas de defensa aérea y un considerable porcentaje del total del poderío naval tanto de Rusia como de la OTAN en el Mar Negro nos dan un claro panorama sobre la existencia de balance y equilibrio en el poderío militar de ambos (El País, 2021). El conflicto armado, en este contexto, deja de ser atractivo para ambos y se prefieren las vías de diálogo diplomático. Lo cual, de hecho, podríamos afirmar que se visualiza actualmente.
Por otro lado, la reunión virtual entre Joe Biden y Vladimir Putin permite calmar, en parte, la incertidumbre en torno al escenario en el cual Rusia utilice en el futuro el proyecto en cuestión como un arma de coacción tanto política como económica en contra de Ucrania. Ello debido a que se afirma que el mandatario estadounidense ha ofrecido la cooperación en favor del funcionamiento del gasoducto en cuestión, siempre y cuando Rusia no invada militarmente Ucrania (France 24, 2021). Desde la perspectiva realista, Nord Stream 2 maximiza, al menos en el presente, los intereses individuales de los directamente involucrados en su ejecución.
Muy grandes para caer juntos o muy fuertes para optar por hacerse daño.
Aparentemente, tanto desde la visión liberalista como desde la realista, la crisis energética europea podría estar visualizando la luz al final del túnel en el futuro cercano. Por un lado, la interdependencia económica genera fuertes lazos de interés entre los países involucrados. Ello desincentiva la desunión entre los mismos y, por el contrario, promueve la cooperación en favor del desarrollo y progreso mutuo. Por otro lado, el equilibrio y balance del poderío militar entre dos actores internacionales desincentiva el interés de desembocar en un conflicto armado. En este escenario, los arsenales militares de dos Estados, naciones u organismos internacionales militarmente equilibrados se interpretan como “arsenales de paz” en lugar de ser vistos como arsenales de conflicto.
Al final del día, es más probable la ocurrencia tanto de una crisis comercial sostenida como de un conflicto militar entre Estados, naciones u organismos internacionales económicamente poco interdependientes y, a su vez, militarmente desequilibrados. En el escenario de la crisis energética europea, hay factores que nos permiten intuir que los actores involucrados presentan las suficientes condiciones para ser “muy grandes para caer juntos” o “muy fuertes para hacerse daño”. Pese a que existen múltiples factores en torno a la crisis energética europea que merecen especial atención, una visión de la actualidad a partir de los principales modelos de las RRII es un buen punto de partida para visualizar la actualidad e, incluso, tener cierto alcance predictivo sobre los diversos y fluctuantes acontecimientos surgidos en el marco de la política mundial.
Referencias
Cox, R. W. (Ed.). (1997) The New Realism: Perspectives on Multilateralism and World Order. United Nations University Press.
Deudney, D., & Ikenberry, G. J. (2018). Liberal world: The resilient order. Foreign Affairs, 97, 16. https://heinonline.org/HOL/LandingPage?handle=hein.journals/fora97&div=76&id=&page=
DW. (2021). La casa blanca renuncia a sancionar a Nord Stream 2. Recuperado de:
https://www.dw.com/es/la-casa-blanca-renuncia-a-sancionar-a-nord-stream-2/a-57590010
France 24 (8 de diciembre de 2021). Gasoducto Nord Stream 2, apuesta de EEUU para presionar a Rusia por Ucrania. France 24. https://www.france24.com/es/minuto-a-minuto/20211208-gasoducto-nord-stream-2-apuesta-de-eeuu-para-presionar-a-rusia-por-ucrania
Hobbes, T. (1651). Leviathan or The Matter, Forme and Power of a Commonwealth Ecclesiasticall and Civil. Barnes & Noble Books.
Locke, J. (1664). Questions Concerning the Law of Nature. Cornell University Press.
Paredes, N. (8 de octubre de 2021). El polémico gasoducto Nord Stream 2 (y qué papel puede juga en la crisis energética de Europa). BBC News Mundo. https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-58817851
Sahuquillo, M. & Sevillano, E. (28 de marzo de 2021a). El gasoducto Nord Stream 2 amplía la pugna entre Rusia y Occidente. El País. https://elpais.com/internacional/2021-03-28/el-gasoducto-nord-stream-2-amplia-la-pugna-entre-rusia-y-occidente.html
Sahuquillo, M. & Sevillano, E. (8 de octubre de 2021b). Rusia aprovecha la crisis energética para exhibir fuerza frente a la U.E. El País. https://elpais.com/internacional/2021-11-29/la-rivalidad-entre-rusia-y-occidente-consolida-la-tension-en-el-mar-negro.html
Sahuquillo, M. & Sevillano, E. (29 de noviembre de 2021c). La rivalidad entre Rusia y Occidente consolida las tensión en el Mar Negro. El País. https://elpais.com/internacional/2021-11-29/la-rivalidad-entre-rusia-y-occidente-consolida-la-tension-en-el-mar-negro.html