¿Qué factores inciden en el aumento del precio del dólar?
Por Gabriela Bendezú, alumna de Economía de la Universidad del Pacífico
Hace unas semanas, el dólar se presentó en su nivel más alto desde el 2002. Muchas preguntas surgen al respecto, así como incertidumbre acerca de su precio en el futuro. ¿Qué hacer si sigue aumentando? ¿Qué relación hay entre el alza de esta divisa y la situación actual del país?
En épocas de crisis, las personas tienden a refugiarse en el dólar, pues si la moneda nacional –en este caso, el sol– pierde su valor, existe la posibilidad de que el dólar no lo haga. Esto se debe a que el dólar es una moneda que no depende de la economía nacional sino de la mundial. Por ello, muchos empresarios han venido acumulando dólares para tener un respaldo en caso de que la situación actual nacional siga empeorando. Ante este hecho, es relevante mencionar que aún el 9% de personas naturales y el 37% de empresas obtiene préstamos y realiza transacciones en dólares, pues la desconfianza hacia la moneda nacional sigue presente entre los peruanos, aunque cada vez menos. Además de que hay una ligera diferencia en las tasas de interés, la tasa en soles es mayor a la de dólares, lo que tiende a hacer un poco más atractivos los préstamos en dólares.
Asimismo, el incremento de casos positivos de COVID-19 en el país ha puesto nerviosos tanto a inversionistas como empresarios que se ven afectados con las caídas en la producción nacional, ya que este aumento crea una incertidumbre sobre el futuro del país respecto a la economía y producción nacional. Ya se estima que el Perú cerrará el año con una caída mínima de 12% en el Producto Bruto Interno (PBI) y mientras más se alarguen las cuarentenas, el descenso puede llegar a ser aún mayor pues impiden que los trabajos se desarrollen en su total capacidad y, por ende, presenten una menor producción. Además, es importante recalcar que la reducción de aforos en los locales y el hecho de mantener a la población de riesgo en teletrabajo también afecta a la producción total.
Por un lado, este aumento en el número de casos de coronavirus confirmados en el país desde que se levantó la cuarentena nacional alimenta las tensiones de los inversionistas y empresarios ya que debilitarán aún más la demanda interna. El desempleo ha aumentado, muchos contratos no han sido renovados y muchas empresas han dejado de contratar personal, todo ello afecta los ingresos de los hogares y con ello, su capacidad de compra.
Por otro lado, la recuperación en Estados Unidos y países europeos incrementa la confianza. Ello resulta en una salida de capitales del Perú hacia estos países, en especial de las inversiones cartera –inversiones de corto plazo–, pues esta mayor confianza se refleja en una sensación de que el dinero a invertir se encuentra más seguro en el extranjero que aquí.
La situación política del país también influye y altera las decisiones de quienes planean invertir o realizar negocios. Las nuevas leyes en debate en el congreso, como la planteada por el Poder Ejecutivo sobre la reducción de años de aporte requeridos a la ONP, y el año electoral que se viene generan incertidumbre en el corto y mediano plazo. Por ello, puede que el sol no llegue a recuperar el valor que tenía a inicios de la cuarentena. Es decir, es probable que el dólar baje, pero no en gran magnitud hasta el próximo año después de las elecciones.
Una forma de eliminar este riesgo cambiario –cambios en el precio del dólar– es incurrir en deudas en la moneda en la cual se recibe el sueldo o ahorrar en la moneda en la que gastas o vas a realizar gastos. Por ejemplo, si una persona recibe su sueldo mensual en soles, debería solicitar un préstamo en soles. De esta forma, mantener gastos e ingresos en la misma moneda, a pesar de que las tasas de interés para préstamos en dólares sean más atractivas (menores que las tasas de interés en soles), será mucho más conveniente pues ante futuras variaciones en el tipo de cambio no se verán afectados.
Finalmente, es necesario mantener la calma entre peruanos y entender que esta alza es resultado, no solo de la situación peruana sino internacional. Además, este aumento es transitorio debido a la coyuntura política y a las tensiones de la pandemia. Las recomendaciones previamente mencionadas pueden ayudar a que, en el futuro, los efectos de alguna variación en el tipo de cambio sean menores en la población peruana.