Reactiva Perú, ¿Un acierto o un fracaso?
David Amésquita Chávez, estudiante de Economía de la Universidad del Pacìfico
Hoy en día, estar al mando de una empresa es complicado. Independientemente del sector, el coronavirus ha sido un dolor de cabeza para la actividad económica del país, contrayendo la demanda de los consumidores y el ingreso de las empresas.
Muchas compañías, a pesar de no tener el nivel de ventas usual, tuvieron que pagar alquileres, sueldos, cuentas a proveedores, entre otros. Por este motivo nace Reactiva Perú, la apuesta del Estado Peruano para responder al problema de liquidez que enfrenta la micro, pequeña, mediana y gran empresa por la coyuntura actual.
Los comentarios sobre el programa han sido diversos, hay quienes critican duramente su funcionamiento y otros que reconocen como buena la iniciativa del MEF, BCRP y la SBS. Si hay que evaluar Reactiva Perú, ¿Es un acierto o un fracaso?
Antes de pasar al análisis, recordemos cómo funciona. Reactiva Perú es un programa que otorga garantías a las empresas para que puedan acceder a créditos de capital de trabajo y así cumplir con sus obligaciones de corto plazo.
Inicialmente, para la primera fase, se entregaron S/30,000 millones en garantías. En la segunda fase, se brindaron S/30,000 millones adicionales, llegando a una cifra total de S/60,000 millones. Para que tengan una idea de la dimensión, este monto es equivalente al 34% del presupuesto anual del Estado para el 2020 o al 8% del PBI (MEF, 2020).
¿Por qué utilizaron este mecanismo para incentivar la economía peruana? Usualmente, en tiempos de crisis, el problema suele ser que las entidades financieras “cierran el caño”. El gran nivel de incertidumbre y el impacto en las empresas complica su capacidad para poder honrar sus obligaciones.
De esta manera, Reactiva predispone un escenario de “riesgo compartido” con el Estado, lo cual permite que las entidades sigan prestando e inclusive aumenten su apetito por dar créditos.
Como vemos en el gráfico, gracias a Reactiva las empresas de todo tamaño recibieron más créditos. Especialmente las pymes que, sin este beneficio, hubieran recibido menos créditos en comparación al año pasado (-0.8%) a pesar de la necesidad de liquidez (BCRP, 2020).
Fuente: BCRP (2020). Elaboración propia
A continuación, se exploran las críticas al programa y se evalúan las mismas:
“Reactiva Perú ha favorecido a las grandes empresas y no a la micro y pequeña empresa”.
Si evaluamos los primeros S/30,000 millones y vemos la distribución por montos, efectivamente las grandes y medianas empresas obtuvieron S/22,724 millones, es decir, cerca del 75% del total. No obstante, esto tiene sentido.
Estas empresas tienen costos más altos para producir o más de 250 trabajadores; mientras que las microempresas tienen menos de 10 trabajadores. ¿Por qué es vital analizar esto? Porque tiene sentido que las garantías más grandes vayan a las empresas con obligaciones de mayor dimensión. Además, es necesario que las grandes empresas reciban el préstamo porque son las que mueven la economía peruana.
Por otra parte, si vemos la distribución de los S/30,000 millones por número de empresas beneficiadas, encontramos que el 70% de las empresas que recibieron préstamos de Reactiva Perú han sido mypes (aproximadamente 51,500) (BCRP, 2020).
Sin embargo, según el Ministerio de Producción, en el 2017 había 1.8 millones de mypes formales. En otras palabras, el 3% ha podido acceder a los préstamos (PRODUCE, 2018). Esto era algo de esperarse pues las grandes entidades financieras no suelen prestar a todas las mypes, sino a las que demuestran estabilidad y trayectoria (alrededor de 2 años como mínimo).
Recordemos que estudios señalan que el 75% de mypes no llegan a consolidarse y terminan desapareciendo (Avolio, Mesones, & Roca, 2011). En ese sentido, no es válido culpar a las instituciones financieras por las limitaciones del programa. Por si fuera poco, la cifra de 1.8 millones solo incluye a las mypes formales. ¿Qué se está haciendo por las mypes informales?
En respuesta, el Estado lanzó FAE-MYPE, un programa orientado especialmente a este grupo de empresas. Con esta iniciativa, 143,000 mypes adicionales han sido beneficiadas. No obstante, aún hay muchas otras que han sido dejadas de lado. Con respecto a este punto, no olvidemos que las mypes emplean aproximadamente a 8.4 millones de peruanos y también tienen una participación importante en la actividad económica (19% del PBI) (El Peruano, 2019).
A la luz de la evidencia, Reactiva es una iniciativa que ha llegado a todo tamaño de empresa, pero que está orientada a atender al sector formal. ¿Se podría complementar con medidas para el sector informal? ¿Hay fondos para esto?
“Las tasas otorgadas a la micro y pequeña empresa son muy altas”.
¿Están seguros? En general, para todo tamaño de empresa, se presentan tasas de interés en niveles mínimos históricos. Por si no lo sabían, la tasa promedio para la micro y pequeña empresa antes de la cuarentena era de 43.7% y 22.5%, respectivamente.
Los desembolsos de Reactiva evidencian una importante reducción en términos de costo financiero para el mes mayo. La tasa promedio fue de 7% y 3.2% para la micro y pequeña empresa (BCRP, 2020). Si bien estas tasas pueden ser mayores a las de las grandes empresas, esto guarda sentido con el riesgo asociado a las pymes. Recordemos que estas están más expuestas a quebrar, lo cual no asegura que puedan pagar el préstamo (Gráfico N°2).
*Del 1 al 16 de junio.
Fuente: BCRP (2020). Elaboración propia.
“Reactiva Perú ha favorecido a empresas que están relacionadas con casos de corrupción”.
Probablemente, este fue uno de los puntos más controversiales de la primera fase. Dentro de las empresas beneficiadas se identificaron algunas relacionadas al caso Lava Jato y a los Panama Papers. Si bien en el documento con el que se crea Reactiva (DL N°1455 y N°1457) se menciona la ley N°30737 que asegura el pago inmediato de la reparación civil al Estado en casos de corrupción, no existen más filtros en relación al tema de corrupción.
Este punto clave no fue muy considerado al desarrollar el programa y va en contra al “mantra” del Gobierno que ha sido combatir la corrupción. En la segunda fase, se modificaron los filtros de selección de modo que ninguna empresa con casos vigentes de corrupción se pueda beneficiar.
¿Lo malo? Recién la semana pasada se iniciaron los desembolsos, es decir, el proceso es mucho más lento. Las más perjudicadas son las empresas que requieren los fondos con urgencia.
“Reactiva Perú ha favorecido a empresas que han aplicado la suspensión perfecta”.
Desde el punto de vista legal, está permitido. Si se observan los requisitos para acceder al bono de Reactiva, aplicar la suspensión perfecta no es un condicionante. De la misma manera, las normas que regulan la suspensión perfecta no mencionan nada de Reactiva.
Sin embargo, ¿Es correcto el uso de Reactiva Perú en este caso? Es discutible, considero que existen empresas que aun aplicando la suspensión perfecta requieren del Reactiva para poder sobrevivir.
Por ejemplo: todas las empresas de turismo. Estas se han acogido a la suspensión perfecta y han accedido a la primera fase de Reactiva. Lo necesitan pues el turismo está estancado. Sin embargo, también hay que reconocer que hay muchas otras empresas que aprovechan la suspensión perfecta para reducir sus gastos en personal y aumentar su liquidez.
En conclusión, como señaló Julio Velarde en una entrevista a este diario, Reactiva Perú es una medida necesaria y crucial en este contexto de coronavirus. Ha permitido que muchas empresas, principalmente formales, cuenten con el capital necesario para seguir operando, produciendo bienes o brindando servicios y dando puestos de trabajo.
Asimismo, Reactiva impulsó los créditos para todas las empresas, beneficiando a grandes y pequeños. Por si fuera poco, a tasas bastante atractivas (mínimos históricos). Si bien, no fue un programa perfecto pues se detectaron algunas empresas que estuvieron involucradas en temas de corrupción y otras que sacaron provecho de la suspensión perfecta, soy de la opinión de que Reactiva Perú fue un acierto del Gobierno por todo lo presentado previamente.
Bibliografía
Avolio, B., Mesones, A., & Roca, E. (2011). Factores que Limitan el Crecimientode las Micro y Pequeñas Empresas en el Perú (MYPES). Academia, 70-80.
BCRP. (2020). Crédito al sector privado creció 13.3% anual a junio apoyado por Reactiva Perú. Obtenido de https://www.bcrp.gob.pe/docs/Transparencia/Notas-Informativas/2020/nota-informativa-2020-07-23.pdf
BCRP. (2020). El 70% de las empresas que recibieron créditos Reactiva Perú fueron mypes. Obtenido de https://www.bcrp.gob.pe/docs/Transparencia/Notas-Informativas/2020/nota-informativa-2020-06-14.pdf
BCRP. (2020). Tasas de interés para mypes bajaron significativamente. Obtenido de https://www.bcrp.gob.pe/docs/Transparencia/Notas-Informativas/2020/nota-informativa-2020-06-28.pdf
El Peruano. (2019). Ventas de las mypes representan 19% del PBI. Obtenido de https://elperuano.pe/noticia-ventas-de-mypes-representan-19-del-pbi-82195.aspx
MEF. (2020). Programa de Garantías “Reactiva Perú”. Obtenido de https://www.mef.gob.pe/es/que-es-reactiva-peru
PRODUCE. (2018). Estadística MIPYME. Obtenido de http://ogeiee.produce.gob.pe/index.php/shortcode/estadistica-oee/estadisticas-mipyme