Contención y Reactivación: las armas del MEF y BCRP

Anibal Fernando Torres, alumno de Economía de la Universidad del Pacífico

El domingo 29 de marzo, a las 21:00 horas, estaba programada una conversación entre la ministra de Economía y Finanzas del Perú, María Antonieta Alva Luperdi; y la panelista Sol Carreño en el programa Cuarto Poder, transmitido por América Televisión.

Para el ciudadano peruano, las palabras de Alva se han vuelto tan importantes como las del presidente Martín Vizcarra. Ambos transmiten tranquilidad y son claros en el mensaje que otorgan en el día a día. Sin embargo, escuchar esa entrevista era crucial debido a que la ministra del MEF explicaría qué medidas económicas aplicaría el Estado para poder combatir la crisis socioeconómica, causada por el COVID-19.

“Como Gobierno haremos todos los esfuerzos posibles. Por ahora hemos previsto inyectar aproximadamente 12 puntos porcentuales del PBI. Si se requiere más, se va a dar más, lo importante para nosotros es proteger el empleo y obviamente salir lo más pronto posible de esta crisis para iniciar el proceso de reactivación económica”, fue lo que destacó Alva.

Explicó también, de qué manera se desembolsaría este monto equivalente al 12% del Producto Bruto Interno nacional. Se aplicará un proyecto que estará dividido en dos etapas: Contención y Reactivación.

En la etapa de Contención, existen dos fases. En la primera, se estima realizar un gasto equivalente a los 30 mil millones de nuevos soles. El desembolso de dinero en esta fase busca mejorar el sistema de salud del Perú; así como también compensar el hecho de que el sector informal no esté laborando, con bonos otorgados de 720 nuevos soles por persona. La segunda fase va alineada con el Banco Central de Reserva (BCRP), el cual elaborará un esquema de garantías y utilizará otros 30 mil millones de nuevos soles para préstamos a las empresas. Esta política se implementará con el fin de que las compañías puedan mantener su actividad y que la gente pueda conservar su empleo.

Julio Velarde, presidente del BCRP, manifestó en una entrevista a canal N lo siguiente: “El Banco Central de Reserva generará préstamos, por un periodo largo, a los bancos comerciales a una tasa de 1.25% anual, la cual puede bajar hasta 1%. El banco comercial, poseedor de una cartera de créditos, deberá dar en garantía al BCR para obtener la liquidez necesaria. Esto se hace con el fin de no aumentar el déficit presente”.

El mensaje es claro: Es muy probable que, debido a la gran reducción de ingresos por caída en sus ventas, las compañías necesiten liquidez para cubrir sus costos. Ante esto, el BCRP busca ofrecer préstamos a las empresas operadoras en nuestro país, por medio de los bancos comerciales. El objetivo de este desembolso es que las empresas, después de la pandemia, continúen operando ya que son ellas las encargadas de otorgar el empleo. ¿Por qué? Porque lo que se busca es no romper la cadena de pagos. Se quiere evitar que la economía peruana llegue al punto que sea imposible pagar salarios, deudas, alquileres, etc.

Por ejemplo: mis ingresos dependen de lo que yo trabajo en el día a día. Con esto, yo pago el alquiler de mi departamento. Al no poder salir a laborar, yo no puedo pagar las cuotas de este mismo. Ahora, supongamos que el dueño del departamento tiene una empresa encargada de la distribución de productos de consumo masivo. Al no recibir el monto del alquiler, no puede pagarles a los trabajadores de su compañía. Uno de ellos tiene tres hijos menores que debe alimentar. Sin embargo, si no percibe ingresos, no tendrá cómo. Justamente eso es lo que se quiere evitar: romper la cadena de pagos.

Con respecto a la etapa de Reactivación; el presidente de la República, Martín Vizcarra, anunció en conferencia de prensa, la creación del programa Reactiva Perú, la cual consiste en un fondo empresarial que permitirá otorgar créditos a más de 350 mil empresas. De estas, aproximadamente 314 mil son pequeños negocios que emplean menos de 10 personas en sus centros de trabajo. Su uso será únicamente para poder pagar obligaciones con acreedores, proveedores y trabajadores. Asimismo, se verán obligadas a suspender el pago de dividendos y utilidades.

Por su parte, la ministra Alva enfatizó también que esta crisis está golpeando a toda la economía peruana en general, sin importar el tamaño de las empresas. Algunos sectores, cómo es el caso del turismo, se está evaluando una posible aplicación de subsidios, así como poder otorgarle ciertos beneficios tributarios.

Ahora, la pregunta que surge entre muchos de nosotros es: ¿Cómo es posible que el Estado pueda desembolsar grandes montos de dinero? ¿Acaso cuenta con grandes reservas que le permiten aplicar tal medida?

La respuesta es sí. Alva Luperdí manifestó en el programa de América Televisión que “tenemos la espalda fiscal para tomar medidas audaces”, y ello es cierto: en las últimas tres décadas, Perú ha creado un monto considerable de ahorros, producto a una adecuada política fiscal bien empleada y a un escaso endeudamiento.

Daniel García Marco, redactó un interesante artículo en BBC News Mundo titulado: “Coronavirus: qué dice sobre la economía (y el gobierno) de Perú que el país prepare el mayor plan de estímulo de América Latina contra el COVID-19”. En él, Jorge Chávez, ex presidente del Banco Central de Reserva, se animó a declarar que “las finanzas públicas del Perú son las más fuertes de América Latina” y pues, los números lo respaldan: 68.044 millones de dólares y 27% del PBI nacional, son las reservas en el BCR y el monto de la deuda pública, respectivamente.

Además, nuestro país cuenta con una tasa de inflación por debajo del 2% (Gestión,2020) y nuestra moneda, el nuevo sol, es una de las menos volátiles en toda la región. Sin lugar a duda, la alza en precios de materia prima durante los últimos años ha sido el pilar fundamental para que el Perú se enriquezca mediante el rol de gran exportador.

Es ahora donde se necesitan utilizar las reservas del BCR. El Poder Ejecutivo ha sido muy claro al expresar que no escatimarán recursos tanto para la salud de la población peruana, como para la reactivación de la economía. Por lo tanto, debemos confiar en las políticas socioeconómicas que establecerán en las próximas semanas. Diariamente, tanto los ministros como el presidente de la Nación otorgan conferencias de prensa al medio día, describiendo la situación cotidiana del país. Como población, estamos en el deber de informarnos qué medidas está tomando el Estado para combatir el virus nacido en Wuhan, así como también en cumplir la cuarentena impuesta. Ellos están haciendo su mejor esfuerzo por sacar esta situación adelante. Actuemos recíprocamente, todos debemos “remar” hacía el mismo lado.