Coronavirus: el impacto a largo plazo
Lyssete Bueno, estudiante de Administración de la Universidad del Pacífico
El impacto del COVID-19 ha superado ampliamente el ámbito de la salud. Hemos visto el surgimiento de nuevas maneras de interacción social, rigurosas políticas de Estado y cambiantes formas de hacer negocios. Si bien es una situación en desarrollo, indudablemente impactará a largo plazo las dinámicas de las empresas, tanto en la manera de trabajar como en lo que es demandado de ellas. Considerando aquello, en el presente artículo ahondaremos en el efecto de la actual pandemia en las tendencias del teletrabajo y negocios online, así como en los retos presentados al sector de telecomunicaciones e industrias relacionadas al turismo.
Trabajo desde casa
Según Global Workplace Analytics hasta antes de la pandemia, el empleo remoto crecía un 10% anualmente. Sin embargo, ahora se estima que la cifra será mucho mayor. La adopción podrá motivarse por dos factores importantes. Primero, los incentivos que algunos proveedores de servicios han ofrecido. Zoom, Slack y Microsoft proveen de forma gratuita temporalmente sus servicios con el objetivo de captar nuevos clientes. Esto reduce el costo de experimentar con sus herramientas antes de invertir a largo plazo. Segundo, los gobiernos han recomendado recurrir al teletrabajo. El presidente de E.E.U.U. Donald Trump recientemente urgió a las agencias estatales implementar el teletrabajo, a pesar de que su gestión habría desfavorecido esta tendencia en el Estado. Además, diversos países han acelerado proyectos de ley respecto a esta práctica. Este es el caso de Chile que promulgó la Ley del Teletrabajo el 24 de marzo.
Retos para empresas de telecomunicaciones
Las empresas de telecomunicaciones han experimentado un crecimiento inesperado de demanda de Internet. Se calcula que en las regiones impactadas por la enfermedad, el pico del tráfico de internet ha incrementado un 10%. En el caso de Italia este aumentó en un 30%. Aquellos escenarios han puesto mayor presión en los proveedores de internet para ofrecer mayor banda ancha. Diversas empresas han afirmado poder atender a la nueva alta demanda. Empresas como AT&T, Verizon y Charter anunciaron tener para incrementar su capacidad en caso sea necesario como se haría en un desastre natural. No obstante, a largo plazo se proyecta que la alta demanda acelere la adopción de tecnología 5G. Esta permite conexiones de mayor velocidad que a su vez habilitan servicios de “telesalud” y teleconferencias.
Negocios en ascenso
Mientras que las empresas que operan en instalaciones físicas (“brick-and-mortar”) han recibido un duro golpe en esta crisis de salud, las empresas que ofrecen productos y servicios a través de canales digitales han recibido impulso importante. En E.E.U.U, las empresas de delivery de abarrotes, enseñanza online, delivery de comida, streaming de video e incluso notarías online han incrementado sus transacciones. De manera opuesta, se estima una significativa pérdida de trabajos en negocios retail, cines y restaurantes locales. Susan Athey, profesora de Standford, proyecta que estos cambios serán a largo plazo ya que realmente se están acelerando un cambio de hábitos actual. De manera similar, las empresas relacionadas al teletrabajo también experimentarán un ascenso por una mayor adopción de esta práctica.
Flexibilidad en industrias relacionadas al turismo
Grandes aerolíneas como American, Delta y Jetblue recientemente han modificado sus políticas de cancelaciones y cambios en respuesta a las restricciones de viaje que diversos países han impuesto. “Nunca hemos visto algo así” indicó el cofundador de Airline Weekly, Seth Kaplan. “Aerolíneas famosas por ser inflexibles están siendo muy flexibles ahora. De manera similar, la compañía de alojamiento Airbnb desarrolló una nueva política de cancelaciones para usuarios y “hosts”, que permite bajo ciertas condiciones cancelar un acuerdo. La cadena de hoteles Sonesta ha tomado medidas similares e introdujo una política flexible de cancelación de eventos. La mayoría ha atendido casos específicos mientras que algunas han adaptado sus programas de beneficios para no tener penalidades por cancelaciones. Si bien muchas de estas políticas son específicas a la pandemia, crean un precedente en las industrias relacionadas al turismo para tener mayor flexibilidad y demuestran mayor orientación al cliente.
Como hemos podido observar dos tendencias en particular, el trabajo desde casa y el ascenso de las empresas online que podrán potenciarse a partir de las medidas que el COVID-19 desencadene. Asimismo, los sectores relacionados al turismo y telecomunicaciones tendrán que afrontar nuevos retos por cambios significativos en su demanda. Aún no es claro como estas situaciones serán enfrentadas. Sin embargo, conforme la emergencia sanitaria sea controlada, las empresas tendrán una mayor claridad de cómo adaptarse según sea necesario.