¿Quién sigue a quién? Los políticos y las ideas
Hay tres señales de que CADE Ejecutivos 2018 será una ocasión excepcional para mostrar la voluntad de cambio del empresariado. En primer lugar, después de un año de haber sido conformada, la coalición Empresarios por la Integridad ha aglomerado a 50 empresarios, fundadores, personas que avalan con su nombre y apellido un compromiso estable y permanente con los más altos estándares éticos.
El Consejo Privado de Competitividad hará lo propio y le presentará una serie de propuestas basadas en evidencia al presidente Martín Vizcarra para promover la competitividad del país con una mirada integral en el que el sector privado tiene y debe tener un rol primordial en el crecimiento y desarrollo del país.
Finalmente, habrá un espacio para conversar específicamente sobre la importancia de los centros de investigación (think tanks) en la generación de reformas de política pública. Rafael Aubad (presidente de Pro-Antioquia) y Felipe Kast (senador chileno), hablarán de cómo en Colombia y Chile, este tipo de instituciones encuentran un ambiente favorable para su nacimiento y desarrollo porque el empresariado y la ciudadanía son conscientes de que los políticos necesitan ideas, y si no les dan las correctas, alguien les dará las incorrectas.
Sobre esto último, algunos datos que resultan relevantes. En el mundo existen aproximadamente 8000 think tanks, o centros de pensamiento y de investigación. Solo en Norteamérica (USA, Canada, México) hay casi 2000. El 55% de lo think tanks están en USA y Europa. China tiene más de 500 think tanks, la mayoría regulado o dependiente del gobierno, pero igual generando evidencia para poder hacer política pública.
En Estados Unidos el presupuesto promedio de un think tank es de 30 millones de dólares y el más alto llega a 275 millones de dólares al año. En Perú no hay data relevante al respecto pero dudo que nuestro presupuesto promedio alcance el 2 o 3% de aquella cifra. Los pocos think tanks que existen en Perú, según el ranking de Go To Think Tanks Report, están bastante atrás en indicadores de impacto y su sostenibilidad siempre resulta un riesgo.
¿Qué hacer al respecto? Primero debemos entender que los políticos, como decía Hayek, son seguidores y seguirán las ideas que alguien con poder les implante. Este “alguien” puede ser la prensa, puede ser algún poder económico o social, o puede ser la Academia. Pero esto último, lamentablemente pocas veces ocurre, y es el ideal que debemos perseguir. “La única manera de cambiar el curso de la sociedad será cambiando las ideas. Primero, debes llegar hasta los intelectuales, profesores y escritores con un argumento razonado. Su influencia sobre la sociedad será la que prevalezca, los políticos la seguirán” (Rocío Guijarro, 1999)
En segundo lugar, el empresariado debe comprometerse con el florecimiento de think tanks independientes, transparentes, institucionales. De nada sirve favorecer iniciativas personales o consultorías temporales o de corto alcance. Si bien los think tanks son creaciones que surgen de la ciudadanía, son sostenibles si tienen una intención legítima, y nunca deben convertirse en islas o proyectos atomizados basados en personalismos.
¿Está nuestro empresariado preparado para un compromiso de este nivel? CADE Ejecutivos 2018 seguramente nos dará algunas luces al respecto, pero se respira un aire de esperanza y optimismo que debe primar para que miremos al futuro con una mirada renovada y moderna.