Lava Jato, una prueba más para la economía
El próximo 21 de diciembre se cumplirá un año de que el Departamento de Justicia de Estados Unidos diera a conocer la corrupción de Odebrecht en varios países latinoamericanos, con la complicidad de sus gobiernos y empresas.
La encuesta Pulso Perú, elaborada por Datum, reveló en febrero de este año, que el 85% de los peruanos consideraba que se debe continuar en la lucha contra la corrupción a pesar del impacto negativo que pueda tener en la economía del país. Esta apreciación mayoritaria se daba a nivel de todos los segmentos socioeconómicos, que en el caso del A/B llegaba al 94%. Es muy probable que 9 meses después esta tendencia se haya mantenido, tras conocerse que en los últimos meses los resultados de las investigaciones.
Luego de casi un año del destape que se hiciera en Estados Unidos, nuevamente el caso Lava Jato vuelve a ganar presencia. Esta vez queda claro que en la corrupción de las empresas brasileñas no hubo distingos ideológicos y más de un presidente y alcalde han terminado involucrados en el escándalo.
Todo ello ocurre en las últimas semanas mientras la economía empieza a revertir los resultados negativos del primer semestre. Prueba de ello, por ejemplo, es que en el tercer trimestre, luego de 14 trimestres de caídas consecutivas, la inversión privada nuevamente creció.
Asimismo, los indicadores del consumo privado registran una recuperación, que se refleja en las mayores importaciones de bienes de consumo, principalmente en los bienes no duraderos como alimentos, calzado, artículos de perfumería y cosméticos, tal como destaca el último informe macroeconómico del Banco Central de Reserva.
¿Podrá resistir la economía un nuevo embate del caso Lava Jato? Economistas como Elmer Cuba, en esta edición, consideran que hay fundamentos para afrontar esta nueva prueba. No solo se trata de ruido político, sino que se empieza a salpicar a instituciones como el Ministerio de Economía con la reciente denuncia que involucra al que fuera director general de Endeudamiento y Tesoro Público, Pedro Valentín Cobeñas, hasta el sábado, y que tuviera que alejarse del despacho del jirón Junín y de la OSCE, tras conocerse otro destape.
La presidenta del Consejo de Ministros señala en entrevista a El Comercio que hay que proteger la imagen de la institución presidencial. Esto implica que el propio mandatario despeje cualquier duda que pueda existir con el caso Lava Jato. Y esa es una tarea que está en sus manos.
La llegada de fin de año y el próximo arribo del Papa Francisco el 18 de enero pueden constituirse en válvulas de escape, pero aun así no podrán suprimir de la agenda el caso Lava Jato.
Uno de los fundamentos que despierta esperanza de poder superar este nuevo reto es el mejor entorno de la economía mundial, que significa una mejora en los términos de intercambio, repercutiendo así favorablemente en la economía. Por eso, las proyecciones consideran que pese al Gobierno y al ruido político, la economía volverá a crecer en el 2018.