El corto plazo y las expectativas económicas

El BCR mantuvo en su último Reporte de Inflación su proyección de crecimiento de la economía en 4% para el año, aunque hay variables que todavía están en cuidados intensivos, como son los casos de la inversión privada y también de la pública. Esto muestra, sobre todo de parte de los ministerios, un bajo nivel de ejecución.

Con ese panorama, quedan seis semanas para que la administración Kuczynski asuma la Presidencia y llegue a su fin el modesto desempeño que tuvo Ollanta Humala al frente del Gobierno desde el 2011. Al nuevo mandatario no solo le debe preocupar la relación que tendrá con el Congreso, que estará bajo el control del fujimorismo, sino también la recuperación de la economía en el corto plazo, que puede ser poco rápida en los próximos cinco meses.

Hay sectores que en el corto plazo todavía tendrán las cifras en rojo, como manufactura y las actividades de hidrocarburos, mientras que otros, como construcción, mostrarán un crecimiento cero.
Lo anterior puede agravarse porque sectores como la industria tienen una fuerte contracción en el empleo en los últimos años -tal como Gestión advierte en esta edición- y el dinamismo alcanzado este año por la minería puede decaer el próximo, ya que el efecto de la ampliación de Cerro Verde y el ingreso de Las Bambas no será el mismo. Además, por ahora, no se vislumbran en el horizonte nuevos proyectos mineros de fuerte impacto en la producción.

Es por eso que resulta crucial, tal como el propio mandatario electo ha reconocido, volver a poner en marcha los megaproyectos que están casi paralizados y que representan inversiones por más de US$ 13,000 millones. La repercusión sería inmediata y puede generar que el optimismo despertado por el cambio de gobierno aumente y se desempolven otras iniciativas, como la que acaba de anunciar Southern para retomar la ampliación del complejo de Cuajone.

Impulsar estas iniciativas requiere de una decisión del Poder Ejecutivo. Aquí se espera ver la mano del futuro ministro de Economía, Alfredo Thorne, y del propio Pedro Pablo Kuczynski, por la experiencia que acumuló como ministro de gobiernos anteriores. Sin embargo, hay casos en los cuales se tendrá que hilar muy fino, como será la aprobación de la adenda de bancabilidad para el gasoducto del sur y la emisión de bonos de Petroperú para la modernización de la refinería de Talara.

El Gobierno de PPK tendrá desde el inicio que comunicar adecuadamente el devenir de la recuperación de la economía. Hay acciones que estarán encaminadas hacia las reformas, pero otras deberán estar vinculadas al corto plazo. Recordemos que la mala comunicación ha sido el talón de Aquiles de los últimos tres gobiernos.