Más que un acercamiento
La ocasión también puede ser propicia para enfocarse otra vez en el proceso de descentralización y evaluar mecanismos que se puedan convertir en valiosos para la inversión pública en el interior del país.
Precisamente, la semana pasada en un encuentro realizado en Chiclayo, entre el sector empresarial y los gobiernos regionales, ProInversión presentó el nuevo techo presupuestal que se tiene para el esquema de obras por impuestos.
Así, los gobiernos regionales podrán asignar hasta S/. 4,847 millones y los municipios hasta S/. 16,731 millones. Más allá de las cifras, lo importante fue percibir que hay un real interés en el interior del país por este esquema.
No solo se trata de aquellas regiones ya cercanas al sector empresarial, como Lambayeque, La Libertad o Piura, sino también de otras, como Cajamarca, que mostró propuestas para aplicar este mecanismo.
La pregunta es, entonces, si es suficiente el entusiasmo que puedan tener ahora las nuevas autoridades. Y la respuesta es que se necesita algo más que voluntad.
Ignacio Fombona, ejecutivo de la CAF, realizó durante el evento una reseña de los factores críticos que enfrentan las asociaciones público-privadas, lo cual también se puede extender para aplicar la modalidad de obras por impuestos.
Así, Fombona hizo hincapié en que los gobiernos regionales deben demostrar capacidad financiera y gerencial, demostrar continuidad de políticas, contar con una adecuada selección de proyectos, tener un equipo dedicado y experimentado y preparar adecuadamente los estudios de preinversión.
Es decir, para que se materialice el acercamiento del sector privado con las autoridades de provincias se necesita un claro compromiso político e información confiable.
Estos retos expuestos en el encuentro de la semana pasada no deben caer en saco roto y, más bien, si el próximo mes se abre el debate por las modificaciones a la ley del canon puede ser propicio abordar todas las aristas que implica la inversión pública y las posibilidades de financiamiento.
Y es que no solo se trata de agilizar iniciativas en regiones que cuenten con canon, sino también de impulsar esquemas de obras por impuestos en aquellas zonas del interior del país que no lo tengan.
En ese sentido, resulta alentador que ProInversión ya evalúe propuestas para que se puedan lograr flujos de capitales privados en infraestructura con este último esquema.
Si el encuentro de Chiclayo se pudiera replicar en otras partes del país, se habrá dado un paso para facilitar las inversiones privadas.