3 Claves para Negociar
Negociar es duro. Duro emocionalmente porque se activan pensamientos como “¿y si se aprovechan de mi? ¿Y si no consigo lo que esperan de mi en mi empresa?¿y si piensan que soy muy dura? Definitivamente, es un proceso difícil done entran las emociones, participa el ego, en algunos casos la humildad o hasta la sumisión.
Sin embargo, negociar es una habilidad muy valorada en el mundo empresarial y se espera que lo hagas.
Además, negociamos todo el día. En el trabajo negociamos salario, vacaciones, proyectos, con proveedores, clientes, etc. y en casa negociamos con los hijos (las negociaciones más duras) y con la pareja.
Comparto 3 claves que para mí son fundamentales para negociar:
CLAVE #1: TU ACTITUD.
Si vas con un mindset o mentalidad equivocada, la negociación puede ser dolorosa, dura o un fracaso.
Definitivamente, no hay que ir con “la pata en alto” con actitud de “tengo que ganar”; sino más bien – con una mentalidad enfocada en construir una relación.
No sabes lo maravilloso que será el proceso con esta actitud.
CLAVE #2: PREPÁRATE.
Suena obvio, pero muy pocas personas se preparan antes de un proceso de negociación y por ende – patinan.
3 pasos prácticos para prepararte son: (1) Investiga – para que las aspiraciones de tu negociación sean realistas, dentro de parámetros de la situación, del mercado, etc. (2) Define cuál es el resultado ideal para ti y (3) Define lo mínimo que estarías dispuesto a aceptar.
Haciendo esto rayas la cancha y sabrás que cualquier opción estará entre esos dos mundos y que algo por debajo de tu mínimo es un no.
Estos pasos tan simples reducen horrores tu estrés para negociar y vas a tener un intercambio saludable.
CLAVE #3: MENTALÍZATE
Esta es tal vez la más difícil y la menos practicada, pero ayuda muchísimo para no procrastinar una negociación.
Como al negociar hay muchas emociones en juego, uno debe mentalizarse para prepararse para cualquier resultado separando las emociones de la negociación.
Mentalizarse es imaginar los diferentes posibles escenarios: “qué pasa si consigo el resultado esperado; o – qué pasa si no lo consigo”
En otras palabras, mentalizarse evita que uno se apegue a los resultados y te prepara a que si no resulta la negociación como se esperaba, no es el fin del mundo, procesarás los aprendizajes e idearás el “Plan B.”