¿A quién beneficia revivir el indulto a Fujimori?
Sin duda, a Castillo y Perú Libre. Como es obvio, la familia del ex presidente Alberto Fujimori, sus amigos y simpatizantes, han sido de alguna forma “beneficiados” pero, políticamente, lo ha sido Castillo, por los siguientes motivos:
1. El más evidente es que permite distraer la atención de:
- Los terribles nombramientos que no cesan en su gobierno (solo por mencionar los más recientes: Daniel Salaverry como asesor presidencial y Félix Chero, defensor de un violador, como ministro de Justicia).
- La reducción de la calificación de Perú por S&P o a PetroPerú, que podría costarnos a los peruanos miles de millones de dólares, costo que podría haber sido evitado tan solo no destruyendo activamente la institución.
- También nos distrae de la potencial caída de la inversión minera en 16% en 2023, cuando el precio del cobre está en un alto histórico (similar al que nos llevó a un crecimiento de 160% años atrás, como lo ha destacado Diego Macera).
- Finalmente, distrae del proceso de vacancia. Pero no solo distrae, le da un segundo aire a Castillo con sus aliados de la izquierda.
2. Revivir la carta anti-Fujimorista es casi siempre un éxito asegurado para un gobernante de izquierda. Esto les da la excusa perfecta para una nueva arremetida contra el “legado” de Fujimori. El premier Aníbal Torres, además de sugerir que el TC debería desaparecer, incluso ya lo comparó con Hitler. Por su parte, el canciller Landa, además de decir que la decisión del TC (del que alguna vez fue presidente) es inválida (sic), ya adelantó que la posición del Gobierno es que la decisión debe ser revertida por la CorteIDH.
3. Luego, el propio Castillo ya había dicho que el TC debería desaparecer. Ahora, lo ha repetido Torres. Bermejo ha aprovechado para proponer que los miembros del TC sean elegidos por “el pueblo”. No creo que realmente busquen desaparecer al TC (en el corto plazo) pero sí deslegitimarlo completamente. Como he dicho varias veces aquí, el objetivo inmediato de Perú Libre y Castillo es destruir el estado de derecho. No pueden lograrlo si existe un Tribunal Constitucional legítimos y en plenas funciones. En países comunistas, las cortes son simples fachadas o representaciones que sirven para dar la idea de estado de derecho, cuando en realidad son tiranías. El indulto les permite destruir la legitimidad del TC.
Como nota final, si bien muchas personas pueden tener razones válidas para oponerse al indulto a Fujimori, veamos un poco el contexto, para entender que otras personas (las más visible opositoras del indulto) no tienen las mejores motivaciones para oponerse o -al menos- han sido abiertamente inconsistentes al juzgar indultos a terroristas:
- García-Sayán -en palabras de PPK- “estuvo muy a favor” de indultar terroristas, como ministro de Justicia. García-Sayán hoy está en la ONU y hace pocos años estuvo en la CorteIDH, que ha sido muy activa en reconocer derechos a terroristas.
- La ONU acaba de emitir un comunicado en contra del indulto a Fujimori. ¿Emitió algún comunicado cuando indultaron terroristas relativamente jóvenes con enfermedades menores?
- ¿Alguna asociación de derechos humanos peruana se opuso a alguno de los indultos? ¿Ayudaron a las víctimas del terrorismo a buscar la anulación de dichos indultos internamente o ante la CorteIDH?
- Según publicó el Diario Correo en 2011, El IDL, el mayor opositor del indulto a Fujimori, tiene entre sus filas (revista Ideele) al terrorista indultado Gerardo Saravia. Links aquí y aquí.
- El ex ministro de Salud Cevallos ha condenado el indulto fuertemente, diciendo que es una afrenta contra la memoria del país, pero en 2018 dijo que el #2 de Sendero Luminoso (Osmán Morote) podría trabajar en el Estado porque ninguna norma lo impedía. ¿Eso no afectaría la memoria del país?
- Alberto de Belaunde ha declarado hace poco que está completamente en contra del indulto, calificando la decisión del TC de “vergonzosa”, pero -tal como reportó El Comercio- en 2018 declaró que él estaría a favor de un indulto humanitario a Abimael Guzmán (se retractó luego de ser fuertemente criticado). Link aquí.
- Finalmente, el Gobierno como un todo -especialmente Castillo- parecen muy indignados y empáticos con las víctimas del Estado, pero ¿dónde se van esa indignación y empatía cuando comparten reuniones con gente que pertenece a Sendero Luminoso (Movadef) o cuando nombran ministros o funcionarios sospechosos de ser terroristas o de haber hecho apología al terrorismo?
Esto coloca a muchos ciudadanos de bien en una encrucijada. Queremos derechos humanos pero, ¿estamos dispuestos a compartir la lucha con personas que parecen tener una “debilidad” por terroristas?