Todos comemos gratis, pero algunos comen más gratis que otros
A muchas
personas les han hurtado sus cosas en estacionamientos privados en Lima, por
ejemplo, cuando van a un supermercado o un restaurante de comida rápida. Estos
establecimientos solían -suelen- tener letreros de “No nos responsabilizamos…”.
Ahora la ley los obliga a asumir las pérdidas. Esto, en gran medida, gracias al clamor
de las personas que han sufrido dichos “robos”. Por ejemplo, en un foro de El Comercio, “Androide 18″, comentó:
“Ellos dicen que no se
responsabilizan, pero la ley dice que sí. Así que sus cartelitos están por
gusto. Todos tienen derecho a quejarse si se pierde algo en el auto dentro de
su playa de estacionamiento”.
Así, en un aparente
caso de funcionamiento perfecto de la democracia y la representación, las
demandas de los ciudadanos perjudicados fueron atendidas por nuestros
diligentes congresistas. Todos felices, todos contentos…
Lamento aguarles la
fiesta, pero este caso representa la pesadilla de Robin Hood: Robarle a los pobres para darle a los
ricos. ¿Por qué digo esto? Si los estacionamientos ahora también contienen un
seguro contra robos; serán más caros en las empresas que cobren por el
servicio. Hasta ahí, todo bien en el aspecto redistributivo -aunque no en
relación a la eficiencia. Sin embargo, el problema no acaba ahí: no todos
los estacionamientos cobran. Nadie pagaría por un estacionamiento en McDonalds.
Pagar 5 soles para comprar una hamburguesa de 2, no tiene sentido. Entonces,
¿cómo se cobra el estacionamiento McDonalds? No hay que ser un genio para darse
cuenta que lo cobra a través del precio de las hamburguesas. Con esta ley, el
precio de las hamburguesas simplemente se vuelve más caro. ¿Quiénes pagan por
el precio de dichas hamburguesas? ¿Los que tienen carro? No, lo pagan todos,
los que tienen y los que no tienen carro.
La pérdida social es
equivalente sea que exista ese robo o no, la pregunta es quién paga por él. Sin este “seguro legal”, las pérdidas
por robos son pagadas por los dueños de carros. Con este seguro social, el costo es asumido por toda la sociedad.
Es decir, los que no tienen carro, subsidian el seguro anti-robos de las
personas que sí tienen carro. Ahora, pregúntese, ¿quién tiene más recursos -típicamente-
una persona con o sin carro? Por eso digo, estas leyes no solucionan un
problema social, solo redistribuyen recursos de las personas que menos tienen a
las que más tienen. Si la persona quiere un seguro para sus cosas, puede contratar
a un seguro. La ligera diferencia en relación a hacerlo a través de una ley es
que solo va a ser pagado por él, en lugar de ser pagado por toda la sociedad.
Pero esto no parece muy conveniente, ¿no?, ¡porque todo sabe más rico cuando es
gratis!
Esta misma lógica,
casi sin variaciones, es aplicable a muchos otros ámbitos en Perú, como las
universidades públicas, las pistas (tema de mi anterior post), el Poder Judicial, los arbitrajes gratuitos, etc. Haga el ejercicio por usted mismo:
¿Quién está en capacidad para usar más estos “regalos”
y quiénes los pagan? Si todos pagamos por el sistema de justicia, pero los
ricos usan mucho más ese servicio, ¿quién se está beneficiando? En otras
palabras, lo que es “gratis” para todos, es “más gratis” para los que más
recursos tienen (parafraseando a George Orwell: “Todos somos iguales, pero
algunos son más iguales que otros”).
Ojo que no estoy
haciendo una discusión transcendental entre liberales e igualitarios. No me
opongo radicalmente a la idea de un subsidio cuando tiene por fin reducir la
pobreza -aunque creo que los liberales suelen tener razón en señalar sus inconvenientes-,
sino a la idea de un subsidio inequitativo. Si vamos a subsidiar, subsidiemos a
los que menos tienen. No subsidiemos a los que más tenemos y menos aun con la
plata de los más pobres. Pensemos si al exigir que el sector público financie
nuestros requerimientos -a través de leyes, tributos o subsidios- estamos
actuando como ciudadanos responsables reclamando derechos o como aprovechadores
en busca de favores, a costa de los que menos tienen.
P.D.: Pueden
contactarme en Twitter @osumar
P.D. 2: Mis posts salen los martes.