Potencial transformador de la inteligencia artificial para superar trampas para el desarrollo en América Latina
La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) publicó en noviembre de 2024 un documento con un título aproximado al de esta nota. La mirada es optimista y proactiva: ¿cómo aprovechar las tecnologías de la información y comunicaciones (TICS) y la inteligencia artificial (IA) para superar las actuales trampas para el desarrollo en nuestra región?
AL enfrenta tres grandes trampas o desafíos estructurales que obstaculizan su desarrollo: baja capacidad de crecimiento, alta desigualdad y limitada movilidad social, y debilidad institucional acompañada de una gobernanza poco efectiva. Estos desafíos, que están profundamente interconectados y se retroalimentan, generan un círculo vicioso de estancamiento productivo, exclusión social y fragilidad institucional. Las TICS, IA y otras nuevas tecnologías, ofrecen una oportunidad única para romper ese ciclo.
Resumen
En el documento se analiza cómo la digitalización y, en particular, la IA, pueden catalizar mejoras en la productividad, reducir las brechas de desigualdad y fortalecer las capacidades institucionales en la región. Hoy, la transformación digital ofrece un camino para fortalecer la competitividad, acelerar el aprendizaje, impulsar la innovación y mejorar la calidad de vida de millones de personas.
Este cambio no se dará de manera automática; será necesario un esfuerzo conjunto en el que participen tanto los gobiernos como el sector privado y la sociedad civil para asegurar que los beneficios de la era digital sean compartidos por todos.
Cooperación internacional
Si bien buena parte del avance en esta materia dependerá de los esfuerzos que hagan los países y sus territorios, la cooperación internacional será esencial para enfrentar los desafíos que plantea la transformación digital, como la ciberseguridad, la protección de datos, el comercio digital y la regulación de las nuevas tecnologías, entre otros.
Esta colaboración permitiría establecer principios comunes que garanticen un acceso equitativo a las tecnologías digitales para aprovechar todas las oportunidades que presentan y reducir sus efectos negativos. Al unir esfuerzos y compartir recursos, los países pueden adoptar mejores prácticas, desarrollar infraestructura más robusta, mitigar riesgos y maximizar los beneficios de la digitalización.
Asimismo, se presenta un panorama de las estrategias digitales que los países de la región están implementando, junto con una serie de recomendaciones necesarias para optimizar su efectividad y promover una adopción real y efectiva de las tecnologías digitales. Estas propuestas buscan guiar el diseño de políticas e iniciativas en el marco de una agenda digital regional para 2026.
Estructura
El documento de 97 páginas se estructura en cuatro capítulos. En los tres primeros se abordan las tres trampas del desarrollo antes mencionadas y las oportunidades de transformación.
En el último capítulo se analizan las principales agendas y estrategias de políticas de transformación digital en la región. Con el objetivo de salir de las trampas del desarrollo en que se encuentra AL y el Caribe, se identifican en el documento una serie de iniciativas y acciones que es necesario impulsar para avanzar hacia un uso real y efectivo de la transformación digital, incluido el desarrollo de la IA.
Trampas, TICS e IA
La trampa de baja capacidad para crecer se perpetúa por medio de una serie de factores que se interrelacionan entre sí. Con relación a esta, la transformación digital del tejido empresarial permitiría mejorar la eficiencia de los procesos industriales, optimizar las cadenas de suministro y fomentar la innovación en productos y servicios.
Además, la digitalización facilitaría el acceso a mercados globales, reduciendo la dependencia de sectores tradicionales y promoviendo una diversificación económica (productiva y exportadora) necesaria para el crecimiento sostenible.
En cuanto a la segunda trampa relativa a la elevada desigualdad, la digitalización y las tecnologías emergentes tienen el potencial -si estas se aprovechan- de reducir la desigualdad y mejorar la inclusión, mediante soluciones personalizadas y más eficientes en materia de salud y educación, al mismo tiempo que pueden mejorar el acceso a los servicios básicos, además de crear oportunidades de empleo en sectores de la economía digital, disminuyendo la dependencia de empleos informales y precarios.
Con relación a la tercera trampa, las tecnologías digitales y la IA pueden fortalecer la gobernanza y las instituciones en AL, mejorando la transparencia, la eficiencia y la rendición de cuentas, mediante herramientas diversas como la digitalización de los procesos gubernamentales.
Marco regulatorio AL
Según la CEPAL, si bien varios países de AL y el Caribe han establecido políticas e iniciativas de IA, es evidente que gran parte de las estrategias de IA de la región se centran en el desarrollo ético y la regulación. De hecho, el 35% de las iniciativas sobre políticas y estrategias relacionadas con la IA en AL y el Caribe se focalizan en la ética, en comparación con el 22% en los países de la OCDE.
Este desequilibrio refleja una tendencia a priorizar los marcos regulatorios sobre el despliegue práctico de tecnologías de IA de maneras que podrían impactar o limitar el impacto que podría tener la adopción de la IA directamente sobre la productividad y el crecimiento económico, o las posibilidades de desarrollo de la propia IA.
IA y desarrollo productivo
La CEPAL anota que un aspecto clave para reforzar el enfoque productivo de estos instrumentos es vincular las agendas de transformación digital y de IA con las políticas de desarrollo productivo. Generar sinergias entre ambas áreas aseguraría que el uso de tecnologías digitales se alinee con objetivos más amplios de desarrollo económico.
En términos prácticos, esta integración puede impulsarse de varias formas, como la incorporación de objetivos e instrumentos específicos de transformación digital e IA en las políticas productivas. También es necesario establecer marcos institucionales de coordinación entre las entidades responsables de los temas digitales y productivos.
Además, se pueden crear organismos o unidades especializadas para fomentar la adopción de estas tecnologías en el tejido productivo. Es fundamental, también, desarrollar capacidades en los funcionarios públicos para que puedan diseñar acciones concretas que promuevan la IA y tecnologías avanzadas, especialmente en sectores clave como la manufactura, la agricultura y los servicios. Esta articulación es esencial para enfrentar los retos de productividad y competitividad en la región.
Falta de recursos
La CEPAL anota que más allá del foco de las agendas digitales o estrategias de IA de las diferentes economías de la región, una deficiencia importante de estos instrumentos es la falta de asignaciones presupuestarias específicas.
En comparación con varios países avanzados, donde se hacen explícitos los recursos destinados a implementar las estrategias de IA, en la región, con excepción del Brasil y Colombia, no se incluyen sistemáticamente disposiciones presupuestarias concretas en las estrategias.
A esto se suma el hecho de que muchas de estas estrategias se han desarrollado antes del despliegue masivo de la IA generativa, lo que podría afectar ciertos aspectos de la estrategia.
Institucionalidad inadecuada
Otro problema acuciante, según el organismo regional, es la ausencia de instituciones especializadas capaces de supervisar y promover eficazmente la adopción y regulación de la IA. En la gran mayoría de los países de AL y el Caribe, no existe una autoridad o institución centralizada con la experiencia y el mandato necesarios para supervisar el sector de la IA.
La regulación efectiva y el apoyo para la integración de la IA en todos los sectores exigen instituciones con autoridad regulatoria y capacidad técnica, un elemento crucial que actualmente falta en la mayoría de los países de la región. Esta situación es particularmente grave en el Perú donde la institución encargada es minúscula dentro de la estructura de la Presidencia del Consejo de Ministros.
Complementar y coordinar
Complementar y coordinar los esfuerzos de las estrategias de IA y las agendas digitales también es importante para maximizar el impacto de estas tecnologías. Las agendas digitales abordan aspectos esenciales para la adopción de la IA, como la infraestructura tecnológica, el desarrollo de habilidades digitales y varias cuestiones vinculadas a la gobernanza y la regulación.
Al complementar estas agendas, los países pueden aprovechar la institucionalidad ya existente para coordinar esfuerzos y recursos. La integración de ambas agendas también es fundamental para mejorar y coordinar los esfuerzos en materia de actualización de los marcos regulatorios, además de facilitar la colaboración internacional.
Áreas prioritarias
Se proponen un conjunto de áreas prioritarias. En infraestructura tecnológica, se demanda una conectividad robusta y acceso universal, y es esencial avanzar en la ampliación de capacidades de computación de alto rendimiento e infraestructura descentralizada.
En cuanto a formación y capacidades, la IA exige formación especializada, apoyada por habilidades digitales básicas, incentivando además la promoción y retención de talento especializado, así como la capacitación y el entramiento de la fuerza laboral.
En el ámbito del gobierno digital, es crucial desarrollar modelos de gobernanza digital que potencien el uso de IA, integrando la gestión de datos de manera efectiva. La inclusión social es otro espacio relevante donde la IA puede desempeñar un papel clave al facilitar el acceso a servicios para poblaciones marginadas, promoviendo la equidad de género y evitando la exclusión.
I+D
En I+D se destaca la necesidad de alinear la investigación en IA con las políticas de innovación tecnológica y los objetivos económicos y sociales más amplios. En el área de desarrollo productivo y economía, la IA debe adaptarse a la estructura económica de cada país, con estrategias sectoriales que maximicen su impacto, pero que, al mismo tiempo, posibiliten el avance hacia nuevos sectores y potencien el cambio estructural.
El emprendimiento y la innovación también se pueden ver beneficiados con la IA mediante el impulso de nuevos modelos de negocio y empresas emergentes (start-ups) con nuevos mecanismos de financiamiento y mejoras institucionales. Al mismo tiempo, es importante invertir en la formación continua de los trabajadores y fortalecer las redes de protección social, asegurando, además, que los beneficios de la tecnología se traduzcan en mejores salarios y condiciones laborales.
Gobernanza y ética
En el área de gobernanza y ética, en tanto, es esencial fortalecer la regulación de la IA mediante marcos legislativos que respondan a las necesidades sociales y económicas, y en la cooperación internacional se necesita aprovechar los espacios existentes para compartir mejores prácticas y desarrollar normativas comunes que aborden los desafíos compartidos.
Por último, el fortalecimiento de las capacidades institucionales, la garantía de las asignaciones presupuestarias y la vinculación más estrecha con las políticas de desarrollo productivo son pasos clave para que la región aproveche todo el potencial de la IA.
Colofón
La CEPAL termina señalando que, sin estos ajustes, los países de AL y el Caribe pueden seguir quedándose atrás en esta nueva revolución industrial, desaprovechando los beneficios transformadores que la IA promete para enfrentar las trampas de desarrollo.