¿Cómo evitar una recesión global y los desafíos económicos del presente?: FMI y economistas principales en Davos-Suiza

Mientras en nuestro país seguimos mirándonos al ombligo, en otros lugares se desarrollan discusiones y se avanza en la construcción de soluciones a nivel global. Entre el 22 y 26 de mayo se efectuó la reunión anual del Foro Económico Mundial (FEM) en Davos, Suiza. Este congregó a los líderes políticos y empresariales del mundo; y a los representantes de los organismos internacionales. Efectivamente, faltó la participación de los trabajadores, de muchas ONGs y organizaciones de la Sociedad Civil que le darían mayor pluralidad.

Sin embargo, a pesar de estas ausencias, los niveles de autocrítica y reflexión son relevantes respecto de lo que escuchamos en el Perú en una gran parte del sector empresarial, los medios de comunicación, segmentos de la Academia, y de muchas de las autoridades políticas del Congreso y el Gobierno. Nada más hay que recordar el mapa de riesgos y tendencias internacionales que el FEM edita en enero de cada año donde se relieva los efectos de la creciente desigualdad en la riqueza y de ingresos que está afectando el tejido social en la mayor parte del mundo; la insuficiencia de la acción contra el cambio climático, la destrucción de la biodiversidad, entre otros desafíos.

Temas principales
Las presentaciones generales tuvieron como temas centrales los conflictos geoestratégicos (incluyendo la guerra entre Rusia y Ucrania), la realidad sanitaria global, el cambio climático y la preocupante situación económica internacional. Las mesas simultáneas iniciaron con el tema de sociedad y equidad relativa a una discusión sobre la reconstrucción de la confianza global. Otras fueron las de salud, trabajo y habilidades, clima y naturaleza, tecnología e innovación, cooperación internacional, economía más justa y mejores negocios.

En esta ocasión nos interesa difundir tanto la entrevista a la directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva que centró su discusión en los pasos urgentes para evitar la recesión mundial. Por otra parte, mostrar los resultados clave del informe de perspectivas económicas globales a cargo de los economistas jefe de algunos de los principales bancos, empresas globales y de organismos internacionales como la OCDE, PNUD, BID, entre otros.

Su objetivo es identificar las prioridades para la adopción de medidas por parte de los responsables políticos y los líderes empresariales en respuesta a las conmociones en la economía mundial por la pandemia y los eventos geopolíticos actuales. Todos estos comentarios y recomendaciones pueden ser relevantes para tomar en consideración en nuestro país.

Datos básicos
El FMI proyecta que el crecimiento de la economía mundial se desacelerará de un 6.1% estimado en 2021 a un 3.6 % en 2022 y 2023. La lucha por la paz en Ucrania es primordial. La guerra ha impactado la recuperación económica global del Covid-19. Los bancos centrales tienen un papel importante que desempeñar, y los países deben trabajar juntos para superar los problemas compartidos.

La guerra en Ucrania ha desencadenado una crisis humanitaria y ha retrasado la recuperación de la economía mundial. Según el último informe de perspectivas de la economía mundial publicado en abril de 2022 el impacto de la guerra en los precios de las materias primas y otras presiones de precios hacen que las proyecciones de inflación sean del 5.7 % en las economías avanzadas y del 8.7 % en las economías de mercados emergentes y en desarrollo.

Preocupación central
La directora del FMI señaló que el mundo debe mantenerse enfocado y luchar por la paz en Ucrania para evitar una recesión global. Se está experimentando una crisis tras otra. Primero la pandemia, ahora la guerra en Ucrania. Y eso es un gran revés para la recuperación de la economía mundial.

Como resultado se tuvo que bajar las proyecciones de 143 países en sus perspectivas de crecimiento para 2022 y llevar el crecimiento global de 4.9%, donde se proyectó en octubre del año pasado, a 3.6% donde está hoy. Y, además, se ve una aceleración significativa de la inflación en muchos países.

Inflación y China
Los bancos centrales deben tomar medidas decisivas para recuperar la estabilidad de precios, pero cuando endurecen las condiciones financieras para todos los que tienen una carga de deuda, la capacidad de pagarla es más costosa. Para muchos países, 2020 fue el año del aumento de la deuda y eso se aplica particularmente a los países de bajos ingresos, donde el 60 % de ellos están en situación de sobreendeudamiento. Con tasas de interés altas, las condiciones serían muy difíciles señaló Georgieva.

Se enfrenta también a un aumento significativo de los precios de las materias primas, principalmente debido a la guerra en Ucrania. Y eso es grave cuando se trata del precio de los alimentos para la gente pobre y especialmente en los países pobres. Por último, pero no menos importante, se debe reconocer que la economía china se ha desacelerado principalmente debido a los bloqueos relacionados con la pandemia, misma que tiene un impacto negativo en la región y en el mundo.

Bancos centrales
Las autoridades monetarias tienen la obligación de comunicar de manera muy clara, por las expectativas que generan en las empresas y los consumidores. También deben estar al tanto de la economía, para poder ajustarse rápidamente, en caso de que sea necesario, para evitar una recesión en el futuro.

Necesitan trabajar de la mano con las autoridades fiscales. La política fiscal y la política monetaria en este entorno realmente deben ir de la mano. Esta última debe prestar atención a los más vulnerables que más lo necesitan (personas y empresas) para que se pueda atravesar este período evitando la recesión en la mayoría de los países.

Respuestas del FMI
El FMI dio un paso al frente en tiempos de crisis. En 2020, se intensificó el financiamiento de emergencia y se proporcionó salvavidas a países que enfrentaban el impacto de paralizar su economía. Se otorgaron casi US$ 300,000 millones en préstamos y 650,000 millones en Derechos Especiales de Giro (DEG), un activo de reserva que el FMI puede crear gracias a sus 190 miembros.

Ahora se está tomando parte de estos DEG de países que lo tienen, que no lo necesitan, para prestarlo solo a los países que lo requieren. A estos no solo se les da recursos sino se les proporciona, según ella, una evaluación objetiva e imparcial de su situación económica y las políticas que deben seguir.

Mirar al futuro
Georgieva señala que se si bien la cooperación internacional tuvo efectos positivos en el pasado, también se debe aprender una lección muy importante de la globalización. No funcionó para todos y, por lo tanto, el futuro debe consistir en hacer que los beneficios estén enfocados para las comunidades y ser mucho más conscientes de que no se trata de beneficios globales.

Cuando se mira hacia el futuro, se debe recordar que hay problemas que ningún país puede resolver por sí solo. El clima, los pagos transfronterizos, poder operar globalmente, enfrentar el desafío de la deuda y también elevar la capacidad de países y comunidades para mejorar la vida de las personas finalizó Giorgeva.

Economistas Jefe
Los principales economistas dicen que el mundo se enfrenta a una combinación compleja de desafíos. Se espera que la inflación se mantenga alta en 2022, especialmente en los EE. UU., Europa y América Latina. El mundo se encamina hacia la peor crisis alimentaria de la historia reciente que podría provocar disturbios sociales en los países en desarrollo. Se espera que se acelere la localización y politización de las cadenas de suministro y que los salarios e ingresos más bajos persistan en 2022.

Según los economistas la opinión del público en general en los países de altos ingresos también es pesimista. En solo tres países, EE. UU., Australia y Canadá, más personas dicen que esperan que su nivel de vida aumente en lugar de disminuir. En siete de los 11 países encuestados la mayoría dice que está preocupado por su capacidad para pagar las facturas de su hogar durante los próximos seis meses.

A principios de 2022, la previsión de consenso era que las economías más grandes habían vuelto a las sendas de crecimiento anteriores al Covid-19 a finales de año, encabezadas por China, Europa y EE. UU. Seis meses después, el panorama es significativamente diferente. La mayoría de los economistas esperan un crecimiento entre débil y muy débil en todas partes del mundo.

Desafíos clave
Mayor inflación y costo de vida junto con salarios reales más bajos. En general, las expectativas de inflación son más altas para EE.UU., seguido de Europa y América Latina. Paralelamente, dos tercios de los economistas esperan que los salarios reales promedio disminuyan a corto plazo en las economías desarrolladas, mientras que un tercio no está seguro. La gran mayoría de los encuestados espera que los salarios reales promedio caigan en las economías de bajos ingresos.

Mayor inseguridad alimentaria en las economías en desarrollo. En marzo de 2022, el índice de precios de los alimentos de la FAO saltó a su nivel más alto desde su creación en 1990. En los próximos tres años, los economistas esperan una mayor inseguridad alimentaria en América Latina y el sur de Asia y un entorno altamente inseguro en el África subsahariana y en el Medio Oriente y África del Norte.

La encuesta cita un informe de la ONU que dice que una combinación de aumento de los precios de los alimentos y la energía y su impacto en los presupuestos públicos ya tensos en muchos países podría provocar escasez de alimentos y apagones, y desencadenar conflictos sociales. Los menos afectados en su seguridad alimentaria serían los EE. UU., Europa y, aún en menor medida, China y la región del Este de Asia y el Pacífico.

Menor globalización
Más localización y politización de las cadenas de suministro. Las cadenas de suministro globales se están rediseñado cada vez más en los últimos años por el Brexit, la pandemia y la guerra. En medio de los temores de continuas conmociones, tanto los gobiernos como las empresas están reconsiderando su enfoque de exposición, autosuficiencia y seguridad en las relaciones comerciales y productivas.

Se espera una reestructuración sustancial de las cadenas de suministro en los próximos tres años. También se considera probable la realineación de las cadenas de valor globales. Las empresas están pasando de la eficiencia a la resiliencia dando prioridad a la localización que a la diversificación.

Mayor retroceso de la globalización. Además de fragmentar las cadenas de valor, la pandemia y los conflictos geoestratégicos ha tensado las relaciones comerciales y los lazos financieros. La mayoría de los economistas encuestados esperan que los mercados de bienes, tecnología y trabajo se fragmenten aún más.

Colofón
El informe concluye que además de mitigar el shock inmediato de los precios de la energía, los gobiernos se enfrentan al desafío de revisar sus políticas energéticas nacionales al tiempo que buscan equilibrar la seguridad del suministro con los objetivos relacionados con el clima. Más seguridad energética que muchos ignoran en el Perú. Advierten que al relievar los intereses nacionales a corto plazo se corre el riesgo de restar prioridad a la necesidad urgente de actuar para combatir el cambio climático.