BCRP desbordado
Existen diversas definiciones de la Real Academia de la Lengua Española sobre la palabra desbordarse. Todas estas parecerían pertinentes a las declaraciones del Presidente del BCRP ante CONFIEP la semana pasada. Se rebasó el límite de lo fijado o previsto, se sobrepasó la capacidad intelectual o emocional de alguien, y se salió de los bordes. Los comentarios se alejaron de los estándares de los responsables de los bancos centrales a nivel internacional: mesura, ponderación y rigurosidad. Se lanzó contra la política económica de todos los ex presidentes desde Toledo en adelante hasta Vizcarra. No agradeció su nombramiento a García, Humala y PPK. ¿Solo él tiene la verdad?
Efectivamente, pocos pondrían las manos al fuego por los últimos gobiernos del Perú luego de los destapes de corrupción que los enlodan. Sin embargo, afirmar aún dentro de su lógica que todo estuvo absolutamente mal suena visceral. Desafortunadamente, esos gobiernos fueron comparsas del BCRP en la profundización del modelo neoliberal. El componente más agresivo de las declaraciones fue el relativo al Pdte. Vizcarra. Según él este no estaba preparado para el cargo, no había que esperar mucho ya que no tenía plan alguno. Se demoró 5 días en retractarse señalando que estaba preparado. Quedo mal, cometió un desatino evidente.
Llamó la atención los comentarios sobre los gobiernos de Toledo y García anotando que se avanzó muy poco y solo se implantaron medidas que tuvieron poco impacto. Olvidó recordar que precisamente en el periodo durante el que no estuvo a cargo del BCRP se instauró el sistema de metas de inflación, ahora vigente. Asimismo, ignoró los esfuerzos de consolidación y reconversión de la deuda pública en plazos y monedas desde el MEF. Acertó cuando reiteró sobre la ausencia de planes en los diferentes gobiernos. Sin embargo, el BCRP compartió con estos el menosprecio o subestimación del rol del planeamiento estratégico y por el CEPLAN en particular.
El BCRP debe hacer un mea culpa de sus errores. Se ha equivocado con las tasas de referencia de política monetaria actuando tardíamente y en desarmonía con la provisión de liquidez (al permitir que la tasa interbancaria se desalinee en determinados periodos). Ha tenido una política cambiaria errada que aprecia el sol afectando la competitividad y diversificación productiva. Ha concentrado las reservas internacionales (RIN) en una sola moneda y en activos financieros a corto plazo. Ha sido totalmente laxo en enfrentar los elevados márgenes de intermediación del sistema bancario. No tiene política explícita sobre el crédito interno. Durante un tiempo concentró vencimientos de pasivos a corto plazo y se opuso a que la SBS limitara las operaciones a futuro de la banca comercial en moneda extranjera. Cero comentarios sobre los sobrecostos financieros que se imponen por las altas tasas de interés activas a las micro y pequeñas empresas. Negarse a la constitución de fondos soberanos con alguna porción de las RIN, a la posibilidad de ampliar los roles del BCRP y mantener un BCRP poco plural (endogámico), entre otras.