La Decisión de la Reserva Federal
Hace dos días la Reserva Federal (Banco Central de los Estados Unidos, en adelante FED) decidió comenzar su proceso gradual de normalización monetaria, lo que significó incrementar la tasa de interés en 0.25% (se denomina tasa de interés de fondos federales). Veamos algo de historia. En setiembre de 2008 estalló la crisis financiera en los Estados Unidos y en diciembre del mismo año, la FED decidió ubicar la tasa de interés en cero como un medio para reactivar la economía.
Conviene mencionar que, a diferencia del Perú, en los Estados Unidos la FED tiene como objetivo no solo la estabilidad monetaria, sino también el crecimiento económico y el pleno empleo, definido este como una tasa de desempleo de 5% o menos de la fuerza laboral. En cuanto a la inflación, aunque no existe una meta explícita, sí se sabe que la FED apunta a una meta anual de 2%.
En la medida que la reducción a cero de la tasa de interés no rindió los efectos esperados, se procedió a implementar un programa de estímulo económico denominado “Quantitative Easing” (QE) consistente en la emisión de dinero virtual para inundar el sistema bancario de dinero y así aumentar el crédito. Pasaron los años y los QE terminaron en 2013 y de ahí en adelante siempre se esperó que la FED inicie la normalización monetaria, esto es, que la tasa de interés suba hasta sus niveles “normales” (alrededor de 4%). Sin embargo para ello la economía estadounidense debía lograr las metas establecidas en el párrafo anterior. La realidad es que desde hace varios meses los objetivos ya se lograron. Por ello no sorprende que la tasa de interés haya subido en la reunión del miércoles. Más aún, se espera, de acuerdo con el comunicado de la FED, que siga subiendo hasta 1.50% a fines de 2016. ¿Qué efectos puede tener?
Históricamente cada vez que la FED ha subido tasas de interés, los capitales han migrado desde otros lugares hacia los Estados Unidos, más aún cuando se espera que el proceso continúe durante 2016, es decir, que ocurran entre dos y tres aumentos más. La salida de dólares reduce la oferta de los mismos y presiona al tipo de cambio hacia el alza. Esta asociación entre subida de la tasa y del tipo de cambio es histórica.
En segundo lugar, los créditos de encarecen. Para cualquier gobierno será cada vez más caro endeudarse con el exterior, algo, que dependiendo de la magnitud podría conspirar contra el fin de la desaceleración económica mundial. Desde luego, se trata de una especulación, pero validada por episodios anteriores.
Ningún economista tiene una “bola de cristal” para saber exactamente qué pasará. Algunos dicen que el mercado ya anticipó el aumento y que no ocurrirá nada; puede ser, pero sería la primera vez en la historia. Otros señalan que habrá un salto en el tipo de cambio. Un tercer grupo está más preocupado por lo que ocurrirá en 2016, pues de mantenerse los aumentos, una opción es que la salida de dólares no ocurra por esta subida, sino por las que vendrán. Sea como fuere, es un elemento más que complica el panorama para el Perú en 2016.